El Gobierno turco calificó hoy como 'acción de castigo' el derribo de un helicóptero militar sirio que penetró en su espacio aereo y advirtió de que ha tomado las medidas necesarias para que nadie viole sus fronteras.

'Nadie se atreverá de nuevo a violar las fronteras de Turquía. Se han tomado todas las medidas al respecto', advirtió el ministro de Exteriores turco, Ahmet Davutoglu.

Desde París, donde se ha reunido con sus homólogos de Francia, Estados Unidos y Reino Unido, el jefe de la diplomacia turca explicó a los medios de su país que informará a la OTAN, al secretario general de la ONU y al Consejo de Seguridad sobre el suceso.

'La Fuerza Aérea turca intervino de la forma necesaria de acuerdo con los protocolos de actuación que ha recibido. Se llevó a cabo una acción de castigo. Turquía nunca permitirá este tipo de violaciones de sus fronteras', indicó Davutoglu.

El mandatario turco se refirió así a que Ankara ya había advertido a Siria de que consideraría como una amenaza cualquier vehículo militar sirio que se acercara a su territorio por tierra, mar o aire.

Ese protocolo de actuación fue establecido tras estrellarse un cazabombardero turco en aguas del Mediterráneo en junio de 2012, en lo que Ankara considera que fue un ataque con misiles por parte del régimen sirio de Bachar al Asad.

Tras aquel incidente, Ankara aseguró que daría una respuesta adecuada a su debido tiempo.

Davutoglu explicó hoy que la aeronave siria recibió varias advertencias que no fueron atendidas y que, finalmente, fue derribada cumpliendo esos protocolos.

'Al igual que siempre, estamos determinados a proteger nuestras fronteras y a nuestros ciudadanos hasta el final', advirtió el ministro.

Respecto a la tripulación del helicóptero, el ministro indicó que el aparato cayó en suelo sirio, por lo que aseguró no tener información sobre su estado.

Varios medios turcos habían indicado que los pilotos habían logrado saltar del aparato antes de que se estrellase.

Por su parte, el Estado Mayor turco informó en un comunicado de que el helicóptero derribado era un M-17 que fue detectado acercándose a Turquía a unos 48 kilómetros de la frontera.

Los radares turcos lo siguieron y se emitieron varias advertencias hasta que el aparato se acercó a 9 kilómetros del suelo turco.

'El helicóptero siguió aproximándose a la frontera pese a las advertencias y fue derribado cuando se encontraba en el espacio aéreo turco a las 14.27 hora local (11.27 GMT) por uno de los dos (cazabombarderos) F-16 que estaban patrullando', indicó el comunicado castrense.

Según las autoridades militares, el helicóptero se estrelló en suelo sirio a un kilómetro de la frontera.

Ya antes del anuncio oficial, los medios turcos habían afirmado que una aeronave siria había sido derribada por fuerzas opuestas al régimen de Damasco y que los pilotos habían sido ejecutados por los rebeldes.