Mueren más de un centenar de presos en la cárcel de Alepo
El Cairo - Más de un centenar de presos han muerto desde abril pasado en la cárcel central de Alepo, en el norte de Siria, por las precarias condiciones en las que viven y los ataques contra sus instalaciones, denunció hoy el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
El grupo, con sede en Londres y con una amplia red de activistas sobre el terreno, denunció la muerte de muchos reos por falta de alimentos y medicinas, así como por ejecuciones y estallidos de explosivos en las inmediaciones.
El Observatorio puso como ejemplo el caso de tres reclusos que sufrían tuberculosis y que fallecieron el pasado día 18 por no haber sido medicados. Además, la sarna está muy extendida entre los presos y los propios guardianes de la prisión.
Desde el pasado 2 de mayo, los rebeldes asedian de forma total el centro penitenciario y tienen el control de la carretera que conduce hasta él, por lo que la comida y las medicinas llegan a través de helicópteros que las arrojan desde el aire.
En sus alrededores se registran choques entre las fuerzas del régimen y los insurgentes, que en ocasiones han llegado hasta el interior de la prisión, donde hay unos 4.000 detenidos.
El pasado 15 de mayo, dos coches bomba explotaron junto a un muro y un puesto de control de la cárcel, y poco después los opositores tomaron la comisaría de Musalamiya, en las cercanías.
Ocho días más tarde, un suicida detonó otro vehículo cargado con explosivos en la entrada principal del presidio, lo que ha hecho que las fuerzas del régimen se hayan parapetado en su interior.
El Observatorio hizo un llamamiento al Comité Internacional de la Cruz Roja y a las organizaciones internacionales para que intervengan de forma urgente e introduzcan medicamentos y alimentos lo antes posible.