Damasco - Las Fuerzas Armadas sirias afirmaron hoy que su victoria en la localidad de Quseir, en el oeste del país, es 'un mensaje claro' de que continuarán su lucha contra los 'terroristas', en un mensaje difundido en la televisión oficial.

'La victoria conseguida por el ejército es un mensaje claro para quienes participan en la agresión a Siria, encabezados por el enemigo sionista, sus agentes en la región y sus elementos sobre el terreno, de que la lucha contra el terrorismo continúa para recuperar la seguridad y la estabilidad', dice la nota.

Las Fuerzas Armadas aseguraron que han conseguido documentos que implican a 'partes árabes, regionales y extranjeras en el terrorismo' en Siria y advirtieron de que no tardarán en golpear a los grupos armados estén donde estén.

El texto recuerda que los soldados del régimen 'devolvieron la pasada madrugada la seguridad y la estabilidad a Quseir, que quedó limpia de terroristas tras una serie de operaciones precisas y exitosas'.

El ejército señaló que ahora abre los caminos y peina la zona, después de que anoche causara la muerte de un gran número de milicianos en Quseir y pueblos cercanos.

Durante esas operaciones, algunos hombres armados se entregaron y otros huyeron, mientras que las fuerzas armadas liberaron a personas que presuntamente habían sido utilizadas como escudos humanos.

El régimen se comprometió a tratar 'con misericordia' a quienes se entreguen e instó a los ciudadanos a regresar a sus casas en Quseir.

Las fuerzas gubernamentales, apoyadas por combatientes del grupo chií libanés Hizbulá, iniciaron el pasado 19 de mayo una ofensiva contra los insurgentes para recuperar el control de Quseir.

Esta ciudad, de unos 25.000 habitantes, es un enclave estratégico para los rebeldes debido a su ubicación en la ruta que conecta el norte del Líbano, de mayoría suní, con la provincia central siria de Homs, lo que permite el abastecimiento de armas.

También es fundamental para el régimen, ya que esa carretera comunica Damasco con sus feudos de la costa mediterránea, de mayoría alauí, secta a la que pertenece el presidente Bachar al Asad.