Aumentan a siete los muertos por la gripe aviar en China
Un hombre de 64 años murió hoy por la nueva cepa de virus de gripe aviar H7N9 en Shanghái, el septimo fallecido a causa de este brote en China, donde el número de casos ha ascendido a 24 en ocho días, mientras las autoridades recuerdan que no se han detectado contagios de persona a persona.
La nueva víctima es un varón de 65 años, de apellido He, que falleció en un hospital el domingo y al que se diagnosticó la enfermedad una vez muerto.
Además de este caso, las autoridades locales informaron durante la jornada de hoy de tres personas más contagiadas, una en la provincia de Anhui y dos en la de Jiangsu, ambas regiones en el este de China.
Los gobiernos de las provincias de Shanghái y Jiangsu -las más afectadas por el brote- precisaron que se han realizado pruebas a aquellas personas que han estado en contacto con los nuevos enfermos y que, por ahora, 'no se han hallado signos de infección'.
Es en esa costa de China donde se han detectado hasta el momento todos los contagios y las muertes, siendo la metrópoli de Shanghái la más afectada por el virus.
A las 18:00 horas de hoy (10:00 GMT) China informó de un total de 24 casos de la gripe H7N9, repartidos entre Shanghái (11), Jiangsu (8), Zhejiang (3) y Anhui (2).
El contagio registrado en esta última provincia extiende la zona afectada por el virus a unos 600 kilómetros al noroeste de Shanghái.
En cuanto a los muertos, cinco se sitúan en Shanghái y los dos restantes en Zhejiang.
Otras regiones del país, como Hong Kong y Taiwán, han extremado las medidas de precaución y están llevando a cabo exámenes a pacientes 'sospechosos' de haber contraído el H7N9, unas pruebas que por el momento han dado negativo en todos los casos.
Las autoridades médicas chinas y el representante de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en el país, el doctor Michael O'Leary, descartaron hoy que la información reunida hasta ahora indique que la cepa del virus de la gripe aviar H7N9 se contagie ente humanos, aunque hay que seguir investigando.
Uno de los enfermos, un niño de cuatro años, se ha recuperado, confirmó hoy Wu Fan, directora del Centro de Control y Prevención de Epidemias de Shanghái, quien aseguró que esto prueba que no todo contagio humano del H7N9 tiene por qué suponer una enfermedad grave.
Entretanto, el virus fue detectado ya en varios animales vivos, tanto palomas y pollos en cautividad como pájaros en libertad, mientras China trabaja en la creación de sus propias vacunas para combatirlo, según anunció hoy el director de la nueva oficina de control del H7N9 de la Comisión de Sanidad de China, Liang Wannian.
Su futura fabricación dependerá de si se descubre el posible contagio entre humanos o no, aclaró.
A eso se suma la vigilancia de la situación desde más de 500 hospitales y 400 laboratorios en todo el país, por lo que 'confiamos en mantener la enfermedad bajo control', dijo Liang.
La Comisión Nacional de Sanidad y Planificación Familiar de China anunció también que de las 621 personas que se sabe que han estado en contacto directo con los 27 contagiados registrados hasta la fecha (seis murieron de neumonía), sólo dos tuvieron síntomas gripales, aunque se comprobó que no tienen el H7N9.
De esta manera, las autoridades sanitarias locales no han detectado ningún síntoma anormal ni que indique la menor 'relación epidémica' entre todos ellos.
'Aunque aún no sabemos el origen del contagio, en este momento no hay pruebas de una transmisión sostenida entre humanos', subrayó el representante de la OMS.
O'Leary también negó cualquier posible conexión entre el salto de esta variedad de gripe aviar a seres humanos con la retirada, en marzo, de más de 20,000 cadáveres de cerdo arrojados por granjeros de una provincia vecina al río Huangpu, que cruza Shanghái y de cuyo tramo afectado se toma el 22 por ciento del agua corriente.
A ese escándalo se sumó este fin de semana el hallazgo de 250 kilos de peces muertos, sobre todo carpas, en el mismo distrito shanghainés de Songjiang, aunque no se han detectado toxinas en el agua ni se conocen las causas por el momento.
A pesar de la cercanía genética entre los cerdos y los seres humanos, cualquier posible conexión de ambos sucesos ha sido descartada, aseguró O'Leary, y dijo que la OMS no cree necesario por el momento establecer controles de fiebre en los puertos de entrada a China ni medidas restrictivas sobre el turismo o el comercio.