Lluvia no frustra el día más largo en Stonehenge
Londres - Más de 14.500 personas acudieron esta madrugada al monumento megalítico de Stonehenge, en el suroeste de Inglaterra, para contemplar el amanecer del día más largo del año, el solsticio de verano, aunque la lluvia impidió ver el sol.
Los congregados, entre los que figuraban varias decenas de druidas vestidos con túnicas blancas, acamparon en torno al complejo para ver la salida del sol a las 04.53 hora local (03.53 GMT).
Aunque los tambores sonaron puntuales, la lluvia y el cielo encapotado impidieron contemplar el amanecer y el recorrido del sol entre las piedras del yacimiento.
En declaraciones a la cadena británica BBC, la policía subrayó que la experiencia fue 'muy positiva', pese a los 33 arrestos por robos o consumo de drogas o alcohol y un centenar de incautaciones de marihuana.
'Como cada año, hubo una pequeña minoría decidida a desobedecer la ley, pero esta gente fue tratada con firmeza', afirmó una portavoz.
El anillo prehistórico de Stonehenge, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1986, está formado por grandes bloques de piedra distribuidos en cuatro circunferencias concéntricas y vivió su máximo esplendor hace unos 5.000 años.
Aunque los expertos no saben quién lo construyó ni con qué propósito, con cada solsticio, tanto de invierno como de verano, se convierte en el lugar de encuentro de unas 20.000 personas.
En esta ocasión sin embargo, la fuerte lluvia de la pasada noche mermó el número de asistentes, a los que con motivo de esta fiesta se les permite acercarse a las piedras, habitualmente acordonadas para evitar su deterioro.
Según Christopher Chippindale, del museo de arqueología y antropología de la Universidad de Cambridge, Stonehenge está 'más vivo que nunca', ya que es el objeto de un mayor número de investigaciones académicas, teorías, obras artísticas y mercadotecnia.
'Las piedras en sí mismas aún aguantan de pie, resistiendo en una sociedad que no lo hace', dijo Chippindale en declaraciones a la página web del diario británico 'The Guardian', que considera que Stonehenge sigue siendo 'un rompecabezas sin resolver'.