Un planeta celebra a oscuras su humanidad
Las principales ciudades del mundo se unieron hoy apagando los enormes reflectores que iluminan sus monumentos y estructuras emblemáticas para celebrar la Hora del Planeta por una humanidad en solidaridad contra el cambio climático.
Los enormes reflectores del Empire State Building y el edificio de las Nacionales Unidas en la ciudad de Nueva York se apagaron para unirse a la Hora del Planeta. (EFE)
Monumentos emblemáticos para el turismo mundial, como la Gran Muralla china, el Partenón de Atenas o la Sagrada Familia de Barcelona, quedaron a oscuras durante 60 minutos para sumarse a la iniciativa ambientalista.
La campaña que unió a 147 países fue impulsada por el Fondo Mundial para la Naturaleza (World Wildlife Fund o WWF) y este año fue promovido a través de la internet con un video invitando a la humanidad a unirse. Hoy, 1 de abril, se celebra el Día del Planeta Tierra.
La Hora del Planeta es una campaña que se lleva a cabo desde hace seis años y se ha convertido en la acción voluntaria por el medioambiente más grande del mundo.Nueva Zelanda y Australia fueron los países que iniciaron esta campaña y a la que ya se han sumado 147 naciones en total.
El Empire State y la ONU en Nueva York
Varios de los edificios más emblemáticos de EEUU, como el Empire State o las Naciones Unidas de Nueva York, apagaron sus luces durante una hora para unirse hoy a la Hora del Planeta.
El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, indicó en un comunicado que apagarían 'en solidaridad con los hombres, mujeres y niños, un 20 por ciento de la humanidad, que viven sin acceso a la electricidad'.
Otros hitos arquitectónicos de Nueva York también se han sumado a la iniciativa, como la Biblioteca Pública, el edificio Chrysler y 39 teatros de Broadway.
En la capital estadounidense, Washington, la Catedral Nacional, uno de sus lugares emblemáticos, también desconectó la iluminación durante una hora.
Brasil apagó monumentos en un centenar de ciudades
El Cristo Redentor de Río de Janeiro, los Arcos de Lapa y otros monumentos apagaron hoy sus luces en Brasil para sumarse a la Hora del Planeta, una iniciativa que contó con el apoyo de 102 ciudades del país.
A las 8:30 pm hora local (23.30 GMT), cerca de 450 monumentos, entre ellos algunos de los más simbólicos del país, unas 260 empresas, centros comerciales y establecimientos respaldaron en el país la iniciativa mundial, que pretende sensibilizar contra el cambio climático y la necesidad de preservar el medioambiente.
El Teatro Municipal de Sao Paulo, que estaba previsto que participara en el acto, no lo hizo porque, según dijo un funcionario a Efe, no recibieron instrucciones de apagar las luces de la fachada.
Tampoco se apagaron parte de las luces de la playa de Copacabana, en Río de Janeiro, que lo habían hecho en otros años, pero sí quedó en penumbra la vecina playa de Arpoador.
Este año, el primer país en quedarse a oscuras ha sido Samoa. Detrás de él, y en cascada han ido el resto de naciones del mundo hasta que finalice la jornada en las Islas Cook, en el Pacífico Sur.
Chile apaga el Palacio de La Moneda
Chile se sumó a la celebración mundial de la Hora del Planeta y dejó a oscuras algunos de los sitios más representativos de Santiago, como el Palacio de La Moneda, la Plaza de Armas o la estatua de la virgen del cerro San Cristóbal.
Como ocurrió en años anteriores, a la hora acordada (23.30 GMT) el Gobierno chileno apagó durante una hora las luces de la sede del Ejecutivo, el emblemático Palacio de La Moneda, situado en el centro de la capital chilena.
Los apagones se repitieron en otros puntos de Santiago, como la Plaza de Armas o las torres corporativas de las empresas Telefónica y Entel.
La actividad central tuvo lugar en la ciudad de Valparaíso, donde unos 500 voluntarios se congregaron con antorchas en la Plaza Sotomayor.
También se apagaron las luces en las ciudades de Concepción, Copiapó, Limache y en una pequeña aldea de 200 habitantes ubicada junto al parque nacional de Torres del Paine, en la Patagonia, que cortó por completo el suministro eléctrico.
Perú se une
Las luces de los monumentos, plazas y los edificios emblemáticos de Perú se apagaron también. Atractivos como la Plaza de Armas y el turístico distrito de Miraflores, en Lima, se sumaron al apagón planetario; incluso el último de ellos iluminó sus calles con antorchas que portaban decenas de 'boy scouts'.
En la región de Apurímac, en el sur del país, se realizó una caminata nocturna donde los participantes lucían pulseras fosforescentes, mientras que otras como Ayacucho también se unieron a la medida.
El director de Eficiencia Energética del Ministerio de Energía y Minas de Perú, José Eslava, estimó que si unos 4.6 millones de peruanos se adhirieran a la campaña, se evitaba consumir 38,250 galones de petróleo y se dejaba de emitir 296 toneladas de CO2, o dióxido de carbono.
'La Hora del Planeta empezó como un gesto simbólico. Hoy se ha convertido en el mayor movimiento ambiental en el mundo', señaló hoy Eslava a la agencia estatal Andina.
Vista de la famosa Sagrada Familia, de Barcelona, prendida y apagada en esta foto combinada de EFE.
Monumentos mundiales a oscuras
En Auckland, Nueva Zelanda, el emblemático Sky Tower, el edificio más alto de esta metrópolis, quedó a oscuras durante el apagón planetario, así como el Parlamento Nacional de Wellington.
En la ciudad neozelandesa de Tauranga se celebró un concierto a la luz de las velas para recordar el esfuerzo de sus ciudadanos en la limpieza tras el naufragio del buque carguero Rena, que en octubre pasado causó una catástrofe ecológica al derramar más de 300 toneladas de combustible.
En Australia, el Puente de la bahía y la Ópera, dos de los símbolos de Sídney, también quedaron a oscuras.
En China, las luces que iluminan cada noche el tramo de la milenaria Gran Muralla cercano a Pekín se apagaron hoy durante 60 minutos, en una iniciativa a la que se sumaron unas 120 ciudades más del país asiático.
Shanghái hizo lo propio con el recinto de la Expo 2010 y algunos de sus emblemáticos rascacielos, al igual que Hong Kong con su 'skyline' de la bahía.
También en la India, sus monumentos más importantes quedaron a oscuras para acompañar esta iniciativa.
En Nueva Delhi, se han oscurecido la residencia presidencial, el Rashtrapati Bhavan, la Puerta de la India y el histórico Fuerte Rojo; y en Bombay lo han hecho la estación ferroviaria de Chhatrapati Shivaji y la India Gateway, el famoso arco de la ciudad.
Una de las acciones centrales en España ha tenido lugar frente al Palacio Real de Madrid, donde más de 500 personas han formado un mosaico humano en forma de oso panda gigante, el logo del WWF que es la ONG que promueve esta iniciativa mundial.
A esta acción ecológica, que se lleva a cabo en España por sexto año consecutivo, también quedaron teñidos por la oscuridad lugares destacados como la Sagrada Familia de Barcelona, el Palacio Real de Madrid, la Alhambra de Granada, la Torre del Oro de Sevilla, la Mezquita de Córdoba, el Acueducto de Segovia o la Muralla de Ávila.
En Grecia, la monumental Acrópolis de Atenas, coronada por el famoso Partenón de la diosa Atenea, apagó sus luces, igual que otros edificios de la capital como el Parlamento, el célebre Hotel Grand Bretagne de la Plaza Syntagma y todos los edificios municipales del Ayuntamiento.
La Torre Eiffel, el Arco de Triunfo y la catedral de Notre Dame se apagaron en París, si bien la primera solo lo hizo durante cinco minutos por razones de seguridad.
Puentes, fuentes, plazas parisinas, las Óperas de Bastilla y Garnier, así como el histórico estadio deportivo del Parc des Princes y el Museo del Louvre se unieron al apagón.
En Londres permanecieron a oscuras una hora desde el palacio de Buckingham hasta el reloj Big Ben, pasando por la catedral de San Pablo y el castillo escocés de Edimburgo.
También Portugal se sumó a la iniciativa y en Sintra, el majestuoso conjunto de palacios de Pena y Montserrat declarado Patrimonio de la Humanidad en el año 2000, apagó las luces exteriores de sus monumentos, como otros tantos de la capital lisboeta y de otras ciudades lusas.
En Estambul este año hubo un eco mayor que en anteriores ocasiones, ya que se apagaron los focos de la fachada de la antigua iglesia bizantina Santa Sofía, la Torre de Gálata y los palacios otomanos de Dolmabahçe, Beylerbey y Küçüksu, todos a orillas del Bósforo.
Viena, Budapest y Praga, las tres grandes capitales de lo que fue el Imperio Austro-Húngaro, también se han unido a la campaña dejando a oscuras sus principales símbolos urbanos.
En Austria, quedaron sin luz el Ayuntamiento de Viena, el palacio de Schönbrunn, las sedes del Gobierno y la presidencia situadas en el antiguo Palacio Real (Hofburg); además del 'tejadito dorado' de Innsbruck, o el casco histórico de Salzburgo, ciudad natal de Wolfgang Amadeus Mozart.
Mientras, en Hungría, los grandes puentes a través del Danubio en Budapest se quedaron sin sus tradicionales luces, al igual que el Castillo Real y el Parlamento.
En la República Checa, Praga participó por primera vez en esta iniciativa, con lo que quedaron a oscuras el famoso Puente de Carlos y la fortaleza de Vysehrad, entre otros lugares destacados.
Tomado de informaciones de la Agencia EFE