Los refuerzos de las fuerzas rebeldes libias se empezaron a desplegar el lunes en las afueras de la ciudad donde se encuentra una de las últimas fortalezas de Moamar Gadafi en Libia y dieron a los habitantes la oportunidad de rendirse y evitar un enfrentamiento.

Miles de rebeldes rodean Bani Walid, una ciudad en el desierto al sureste de la capital libia. Gadafi ha estado huyendo desde que perdió Trípoli el mes pasado, informa AP.

Un pequeño convoy rebelde llegó el lunes a un puesto de control que se encuentra aproximadamente a 70 kilómetros (40 millas) de Bani Walid.

Ismail al-Gitani dijo que los combatientes forman parte de un grupo mayor que se encuentra bajo su mando y que él ha recibido la orden de reforzar el área norte de Bani Walid.

Al-Gitani se negó a decir cuántos elementos llegaron con él. Otro comandante rebelde, Mohamed al-Fassi, dijo que la puerta a las negociaciones siguen abiertas en busca de que los habitantes de la ciudad se rindan.