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Reino Unido recupera la tranquilidad

Tras cuatro noches de saqueos, enfrentamientos con la policía y lanzamientos de cócteles molotov que han calcinado coches y comercios, la pasada noche se caracterizó por la tranquilidad en las calles inglesas.

Tan solo incidentes menores y aislados, así como detenciones de algunas de las personas que han participado en los incidentes en los últimos días. En West Midlands, el juzgado ha hecho horas extras durante la noche para que todos ellos vayan pasando a disposición judicial, publica el diario español El País.

La tónica general de los avisos de las distintas autoridades policiales ha sido la misma, una noche en paz en la que desmentían los rumores de disturbios que se lanzaban desde las redes sociales. Se ha llegado incluso a reabrir el tráfico hacia el centro de Birmingham, una de las ciudades a las que se trasladó la violencia la pasada madrugada por el blindaje policial en la capital.

Pero Inglaterra está en guerra consigo misma. El Gobierno dio ayer carta blanca a la policía porque, en palabras del primer ministro David Cameron, 'no vamos a permitir que la cultura del miedo exista en nuestras calles'.

'Sean cuales sean los recursos que necesite la policía, los tendrán. Sean cuales sean las tácticas que la policía crea que necesita emplear, tendrán el apoyo legal para hacerlo. Haremos lo que sea necesario para restaurar la ley y el orden en nuestras calles', proclamó Cameron a las puertas de Downing Street tras reunirse con los jefes policiales y los responsables ministeriales en el marco de Cobra, el organismo de coordinación del Gobierno en casos de emergencia.

Cameron se refirió específicamente a que la policía tiene permiso para utilizar balas de goma y dispondrá de camiones con cañones de agua con un preaviso de 24 horas, aunque subrayó que ahora mismo no son necesarios.

Lea la historia completa siguiendo este enlace.

La subjefa de la policía Sharon Rowe muestra a Cameron uno de los centros de control de los disturbios en Birmingham.
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