Deserciones activan la cuenta regresiva para Gadafi
Con la deserción y fuga a Inglaterra del ministro de Exteriores libio, Musa Kusa, los aliados han comenzado el conteo regresivo para la dictadura de Muamar Gadafi.
El primer ministro británico, David Cameron, alentó ayer a los altos cargos que rodean Gadafi a seguir el ejemplo del que durante 15 años fue jefe de la inteligencia exterior de Libia y que el miércoles por la noche se fugó a Reino Unido.
La decisión de Musa ilustra, según Cameron, 'la desesperación y el miedo que imperan en el corazón del régimen requebrajado y podrido de Gadafi'. Esta deserción es 'un serio revés para la autoridad de Gadafi'.
Otros dos altos cargos han abandonado también a Gadafi, publica el diario español El País.
La renuncia de Ali Abdusalam Treki, antiguo ministro de Exteriores designado por Gadafi para sustituir al también dimitido embajador libio en Naciones Unidas, fue anunciada a través de un comunicado enviado a la agencia Reuters por su sobrino, Sufian Treki, un diplomático destinado en El Cairo.
'He decidido no seguir trabajando o aceptar ningún otro cargo', señala el texto. 'Ruego a Dios que me ayude a participar en la salvación de esta hermosa nación', concluye Treki, que ya está en la capital egipcia.
Más importante, según analistas del periódico español, aún fue la 'traición' del jefe de la inteligencia exterior, Abu Zayd Umar Dorda, que ayer llegó a la isla de Yerba (Túnez).
Estas tres importante defecciones, que se añaden a las de los ministros de Justicia e Interior en febrero y a otras muchas de menor rango, ponen de relieve que el régimen de Gadafi se empieza a requebrajar. A este paso dentro de poco solo le quedará al líder un último reducto: su familia.