En la tercera noche de bombardeos de las fuerzas aliadas en Libia ya han comenzado a aflorar dudas en torno a la operación militar y visos de descoordinación. Mientras tanto, el Presidente Barack Obama asegura que Estados Unidos quiere transferir en cuestión de días el mando de la operación a la OTAN.

Según reportan diversos medios de prensa internacional, algunos de los países miembros de la coalición han expresado ya preocupación en torno la dirección de la intervención bélica.

Obama, por su parte, hizo las expresiones sobre su intención de transferir el liderato de la coalición desde Chile en donde se encuentra como parte de una gira por América Latina.

Entretanto, explosiones siguieron conmoviendo Tripoli por tercera noche consecutiva. Al Yazira informa que dos bases navales han sido afectadas y que el Gobierno libio sigue reportando víctimas e incluso ha ofrecido llevar a la prensa a los hospitales en donde se encuentran los heridos. Asimismo seguidores armados del regente libio, Muanmar el Gadafi, siguieron defendiéndo al país de los ataques a tiro limpio.

Hoy en la mañana Reino Unido y Estados Unidos mostraron diferencias sobre el futuro de Gadafi ante el avance de las fuerzas occidentales, mientras Francia, Italia y Noruega expresaron preocupación ante una operación con diferentes velocidades entre sus integrantes, reporta El País. Francia reconoció que la cooperación en el seno de la coalición no está 'integrada', y el Gobierno italiano ha pedido que la OTAN se haga cargo de la coordinación de las operaciones.

Entretanto, Noruega, que ha enviado seis cazabombarderos F-16 al Mediterráneo para integrarse en la operación, ha dicho que no entrará en acción hasta que no se aclaren específicamente su misión y el asunto del mandato, reporta el diario español.

El Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas se reunió hoy y acordó reunirse nuevamente el jueves para analizar la situación en Libia a una semana de su resolución que autorizó la intervención y después de que este fin de semana el organismo recibiese el pedido de una reunión de urgencia para detener los bombardeos del ministro libio de exteriores, Musa Kusa.