EEUU pide ONU apruebe zona exclusión en Libia
La secretaria estadounidense de Estado, Hillary Clinton, dejó claro que el establecimiento de una zona de exclusión aérea en Libia para frenar los bombardeos del dictador Muamar el Gadafi contra la población sublevada tendrá que contar con el respaldo de Naciones Unidas y ser una decisión multilateral que implique a más países que Estados Unidos.
'Queremos que la comunidad internacional la respalde', dijo Clinton en declaraciones a Sky News. 'Es muy importante que no se trate únicamente de una iniciativa estadounidense, porque esta petición llega del pueblo de Libia, no de fuera; esto no viene de las potencias occidentales o de ningún país del Golfo', añadió en un intento de espantar cualquier acusación de injerencia en asuntos internos libios.
Y añadió: 'Pedimos que el coronel Gadafi abandonde... Cuando un líder se vuelve contra su pueblo, esto implica su final'.
Francia y Reino Unido ultiman un borrador de resolución que presentarán al Consejo de Seguridad y que contempla la creación de dicho espacio sobre territorio libio. Rusia y China, con derecho a veto en el máximo órgano de seguridad de la ONU, ya han advertido que se opondrán a cualquier intervención unilateral en el país magebrí y han reclamado una salida negociada a la actual situación.
la imposición del pasillo aéreo es tecnicamente viable pero requerirá, según expertos militares consultados por el diario español El País, un importante despliegue militar en la zona y posiblemente un ataque previo selectivo para anular las defensas de Gadafi. La iniciativa ha contado en las últimas horas con el respaldo de los países del golfo Pérsico y la Organización de la Conferencia Islámica, algo fundamental porque la petición de los emiratos y Arabia Saudí otorga legitimidad a una intervención extranjera en el Estado árabe.
El presidente estadounidense, Barack Obama, y el primer ministro británico David Cameron coincidieron ayer en que el 'objetivo común' era acabar con la violencia y forzar la salida de Gadafi, según un comunicado la Casa Blanca. En una conversación por teléfono, ambos líderes 'acordaron continuar valorando, también en el contexto de la OTAN, el abanico de posibles respuestas, incluidas la vigilancia, la asistencia humanitaria, el refuerzo del embargo de armas y la zona de exclusión aérea'.
Asimismo, Estados Unidos y sus aliados europeos están considerando el uso de fuerzas navales para hacer llegar ayuda humanitaria a la población libia y para bloquear la llegada de nuevo armamento al régimen de Gadafi.