Houston - Despues de 22 años y medio en el deporte, Bud Selig llegó a su último día como comisionado de las Grandes Ligas pronosticando que el beisbol de las mayores podría expandirse a otros países.

A sólo unas horas de que acaben sus funciones como comisionado en el béisbol profesional de Estados Unidos, Selig dijo que se siente contento con el trabajo que hizo y con los resultados que obtuvo.

'No hay ningún arrepentimiento, todo lo hicimos bien y siempre viendo el progreso del béisbol', dijo.

Durante el tiempo en que Selig ocupó el puesto de comisionado de las Grandes Ligas se expandieron los juegos de fase final y se creó la fórmula de los equipos comodines para la postemporada.

También se pusieron en marcha los juegos de serie interligas, el uso del vídeo para revisar jugadas polémicas, la expansión de equipos de Arizona y de Tampa Bay.

Aprovechando la existencia del internet, se logró una base de datos y de seguimiento de partidos a través de esa red de comunicaciones, y se implantó una de sus medidas que ha causado más polémica, el inicio de las pruebas antidopaje.

Aunque a partir del domingo Selig ya no tendrá injerencia en las medidas que tomen las Grandes Ligas, indicó que 'me voy teniendo el sueño de que este deporte cuente con un sabor más internacional'.

Dijo que para que eso se logre sería necesario tener equipos en otros países, 'y eso puede tomar forma si alguien tiene visión de las cosas, es algo que podría llevarse a cabo', indicó.

Actualmente las Grandes Ligas tienen equipos solamente en Estados Unidos y uno en Canadá.

Selig deja el puesto a uno de sus hombres más cercanos, Rob Manfred, quien a partir del domingo se convertirá en el décimo comisionado de las Grandes Ligas.