Protegerían las colonias de coral que han sido impactadas recientemente por encallamientos de motoras acuáticas, destruyendo colonias coralinas centenarias y causando la muerte de tortugas marinas.

Múltiples organizaciones sin fines de lucro, se han reunido para solicitarle al gobernador Pedro Pierluisi Urrutia que firme el proyecto de ley que establece la Reserva Natural: Los Jardines Submarinos de Vega Baja y Manatí.

El Proyecto del Senado 1395 fue aprobado en los últimas días de sesión en la Asamblea Legislativa. Dicha medida, está radicada por el senador independiente José "Chaco" Vargas Vidot por petición de las organizaciones comunitarias.

De convertirse en ley, generará una zona de restauración de los recursos marítimos y costeros, manteniendo la primera barrera de defensa (arrecifes de coral) ante eventos atmosféricos.

Los arrecifes de coral, además de ser una fuente económica para el turismo, también generaría una economía sostenible para su conservación.

Estas colonias de coral, han sido impactadas en cuatro ocasiones recientemente por encallamientos de motoras acuáticas, destruyendo colonias coralinas centenarias y causando la muerte de tortugas marinas debido al uso de embarcaciones.

Con la declaración de la reserva, se lograría establecer boyas de navegación limitando el paso en las zonas protegidas. Así como le daría continuidad a campañas educativas cruciales para la conservación.

"La reserva estaría protegiendo un área que es considerada a nivel local y a nivel federal como un área que contiene uno de los corales en peligro de extinción y que son base fundamental para el desarrollo de los arrecifes de coral", expresó la bióloga marina, Mariela Declet.

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"Esta es la primera barrera de defensa contra las marejadas y también contra la erosión que estamos sufriendo ahora con el cambio climático tan acelerado, debido a los efectos antropogénicos que nosotros como humanos, hemos estado causando", añadió.

La reserva protegerá desde la desembocadura del río Cibuco en Vega Baja, hasta donde comienza la Reserva Natural de la Playa Mar Chiquita.

Son aproximadamente nueve millas náuticas. Un 0.0086% de reserva.

De acuerdo a lo expresado en la conferencia de prensa, las organizaciones y voluntarios llevan luchando que se convierta el área en una reserva natural desde el 2007.

Aún así, Declet explicó que han logrado proteger los corales entre ellos mismos, por lo que actualmente está "bastante saludable".

"Prácticamente las comunidades, específicamente lo que sería el grupo VIDA, quien está a cargo de la restauración de arrecifes de corales en Vega Baja y Manatí, estamos constantemente entrando al agua. Así que, estamos todas las semanas dentro del agua y cuando hay un evento o una emergencia, somos los primeros en responder", sostuvo Declet a preguntas de NotiCel.

"Podemos decir que la condición de los arrecifes en la zona es bastante saludable. Sin embargo, el impacto continuo que han estado recibiendo por las motoras acuáticas de la zona, han afectado parte de estos procesos de restauración. Por eso es la urgencia y el llamado al gobernador para formar esta reserva. Así nos permitiría marcar puntos de navegación en la zona que le puedan servir de referencia a estos conductores acuáticos y así eviten pasar por la zona que estamos restaurando", aseguró.

El P de la S 1395 ordena al Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) a que desarrolle en un término de 150 días a partir de la aprobación de la ley, el Plan de Manejo y Reglamentación para la rehabilitación y conservación del área.

Dentro del reglamento, también se establecerá los usos y/o actividades no dañinas compatibles con la conservación, así como la viabilidad de actividades recreativas como el surfing, kayaks, entre otras actividades.

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También, el DRNA tendrá que entrar en acuerdos y alianzas con organizaciones sin fines de lucro, para que se establezca el manejo y custodia conjunta de la reserva.

En cuánto a la asignación de fondos, la Oficina de Gerencia y Presupuesto (OGP), el DRNA y la Autoridad de Asesoría Financiera y Agencia Fiscal (AAFAF) tendrán que identificar y garantizar $1 millón para lo estipulado en la medida y $500 mil adicionales para la creación del plan de manejo y conservación de la Reserva.

La Comisión de Agricultura y Recursos Naturales del Senado que preside Albert Torres Berríos, había sometido un informe positivo avalando la medida.

La secretaria del DRNA, Anaís Rodríguez Vega sometió comentarios favor de la medida, así como la organización Para la Naturaleza.

Mientras, la Junta de Planificación reiteró que a pesar de que apoyan las medidas de protección ambiental, era imperativo que se identificara la suma total de inversión.

"De aprobarse la medida, esta tendría un impacto sobre el presupuesto de la agencia, por lo que necesitan la asignación presupuestaria correspondiente, para cubrir los gastos operacionales requeridos. Estos recursos económicos servirán para llevar a cabo la adopción de la demarcación, realizar visitas de campo, celebrar vistas públicas, así como los costos de avisos públicos a la comunidad, según disponen las leyes y los procesos administrativos, u otros gastos que puedan surgir en el proceso", reza el Informe Positivo de la Comisión de Recursos Naturales, Asuntos Ambientales y Reciclaje de la Cámara de Representantes que preside Edgardo Feliciano.

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"Gobernador, le pedimos que deje un legad más allá del cemento, más allá de construcciones, que deje un legado natural para que perdure para esta y las futuras generaciones", concluyó Declet.

Las organizaciones que están apoyando este proyectos son: Grupo Vegabajeños Impulsando el Desarrollo Ambiental Sostenible (V.I.D.A.S.), Descendientes Unidos por la Naturaleza, la Adaptación y la Sostenibilidad (D.U.N.A.S.), y Municipio Autónomo de Manatí.

Así como la Comunidad Pro Reserva Natural, Movimiento Reflexiona y Actúa, Surfrider Puerto Rico, Outcome Project, Marullo Sostenible, Colectivo Vegabajeños Unidos, Manatí Scuba, Corsarios, Wildlife Conservation Society (WCS), Yo Amo Al Tinglar, HJR Reefscaping.

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