El representante Héctor Ferrer Santiago, quien se perfila como candidato a la presidencia, indicó que ejecutaría la iniciativa o una similar con guías para contrataciones.

Mientras sigue siendo un misterio el futuro del Plan de Clasificación y Retribución que se confecciona o se intentó confeccionar en la Cámara de Representantes, el popular Héctor Ferrer Santiago, quien se perfila como aspirante a dirigir el cuerpo legislativo bajo una mayoría de su partido en el 2025, se comprometió a culminar el proceso.

Ayer Ferrer Santiago brindó un mensaje durante el anuncio de candidatura a la gobernación de Jesús Manuel Ortiz en que, si bien no dijo textualmente que buscará la presidencia, sí dio todos los indicios de que así lo hará, lo que desataría una contienda en el lado popular con Jesús Santa Rodríguez.

Quien tendría la contestación sobre el avance del plan que establecería los deberes y los salarios en el cuerpo legislativo sería su presidente Rafael “Tatito” Hernández Montañez, quien no ha estado disponible para entrevista y ha guardado silencio sobre el tema mientras hace campaña en Dorado, donde busca desbancar al alcalde Carlos López.

La confección del plan fue uno de sus compromisos de campaña luego de que durante el periodo eleccionario del 2020 se dieran a conocer escandalosos salarios en la Cámara y en el Senado.

Por ejemplo, en la Cámara los $10,000 mensuales que ganaba la pastora Wilmarie Leduc Jorge, directora de la Oficina de Iniciativas Comunitarias y Bases de Fe y quien llegó a desempeñarse como jefa de personal del cuerpo.

El problema sigue estando en la discusión pública hoy a través del caso federal contra la exrepresentante penepé María Milagros Charbonier, quien según la teoría de la fiscalía federal, infló el salario de su secretaria/recepcionista a $8,000 mensuales para ella quedarse con una tajada.

Ferrer Santiago indicó que se llegó a crear un comité para hacer valer la propuesta de Hernández Montañez y se hizo una especie de sondeo entre los empleados del cuerpo legislativo, que tenían que llenar una hoja con su salario y sus deberes.

NotiCel supo que los salarios a ser incluidos en el nuevo plan se inflaban muy por encima del presupuesto del cuerpo legislativo cuando se intentó parear los salarios devengados con los de la empresa privada.

“Si los fondos están disponibles para establecer escalas salariales en la Asamblea Legislativa, es importante que se establezcan. Por otra parte, si no se puede establecer un Plan de Clasificación y Retribución, hay que buscar la forma de establecer guías y principios para las contrataciones y para poder garantizar la transparencia e identificar banderas rojas”, sostuvo Ferrer Santiago al referirse al conocimiento que se tiene que tener a nivel de la presidencia de cuáles son los salarios, a pesar de que actualmente los legisladores distribuyen su presupuesto asignado como entienden.

Mientras en la Cámara se da la discusión, en el Senado el tema sobre cómo establecer guías de contrataciones y salarios no se ha tocado.

A finales de diciembre del 2020, en medio de lo que Hernández Montañez describió como una crisis fiscal en el cuerpo legislativo provocada por el anterior presidente, Carlos “Johnny” Méndez, el entonces líder entrante del cuerpo legislativo repartió una guía sobre salarios creada durante la presidencia de Jaime Perelló.

Las asignaciones presupuestarias de la primera Sesión Ordinaria del cuatrienio fueron las más bajas en la Cámara desde 1980, a razón de un presupuesto base de $7,000 por oficina.

Los representantes de mayoría tendrían un presupuesto base de $20,000 mensuales por oficina.

Por ejemplo, un mensajero no cobraría más de $2,000 mensuales, un recepcionista y un conductor no cobrarían más de $2,250 y el personal clerical y administrativo no cobraría más de $2,500. El salario más alto sería el de un director de comisión, cuya remuneración oscilaría entre $3,358 y $6,050 mensuales.