Senado aprueba regulaciones al aborto y prohíbe terapias de conversión
En plena Semana de la Mujer, paralelo a manifestaciones en oposición en las inmediaciones del Capitolio y luego de una reunión del caucus de mayoría, el Senado de Puerto Rico aprobó de manera partidista el Proyecto del Senado (PS) 950, que impone nuevas regulaciones al aborto en la Isla.
La votación, además, fue realizada a puerta cerrada del público debido a la clausura de las gradas por alegadas reparaciones en la Casa de las Leyes.
El PS 950, de la autoría de la senadora del Partido Nuevo Progresista (PNP) Nayda Venegas Brown, contó con 20 votos a favor y nueve en contra. La oposición estuvo a cargo de la tambien senadora penepe, Zoe Laboy Alvarado, y la delegación del Partido Popular Democrático (PPD), así como Juan Dalmau Ramírez, del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), y el senador independiente Jose Vargas Vidot.
'Creo que este tema, y la manera en que se ha manejado, alguna gente piensa que las mujeres se levantan en la mañana y dicen 'contra, dejame quedar embarazada para hacerme un aborto'', lamentó Dalmau Ramírez.
El PS 1000, por su parte, tambien fue aprobado con 20 votos a favor y dos abstenidos. Entre los siete votos en contra se encontró el presidente del Senado, Thomas Rivera Schatz.
Las medidas ahora pasan a la Cámara de Representantes para su evaluación.La discusión de la medida duró más de dos horas y fue precedida por la introducción de enmiendas en sala y la especificación de que tanto esa proyecto de ley, como el PS 1000, serían discutidos a la misma vez. En ambos casos, además, se reiteró que se trataba de un hito histórico para la Asamblea Legislativa.
Enfrentados por el derecho a decidir
Aunque no el primer turno, la senadora Venegas Brown defendió la insistencia por regular el aborto, ya que se trataba de 'una industria' en necesidad de intervención legislativa.
'A traves de las ponencias y vistas públicas, quedó más que demostrado que la práctica del aborto en nuestro país es una industria lucrativa en la que, tristemente, la fiscalización ha sido mínima o ninguna, dejando al gobierno en desconocimiento de la situación real', justificó la Senadora del Distrito de Carolina.
En su genesis, el PS 950 insiste en la obligación de los profesionales de la salud de advertir, tanto verbal como por escrito, a las mujeres respecto a las posibles consecuencias adversas de un aborto, descrito como el 'consentimiento informado' de una mujer.
En su alocución, Venegas Brown defendió la medida de su autoría, además de que negó que el proyecto tuviera consideraciones religiosas, puesto que ella es pastora de una iglesia evangelica. Tambien, agradeció al Presidente del Senado por su ayuda en el trámite legislativo.
Rivera Schatz, por su parte, defendió el 'derecho a la vida' y dejó claro que estaba en contra del aborto y que las decisiones del Tribunal Supremo de los Estados Unidos que hasta ahora sostienen su legalidad fácilmente pueden dictar lo opuesto en un futuro.Del mismo modo, el Presidente del Senado aprovechó que tanto el PS 950 y el PS 1000 se discutían a la vez para instar a quienes defendían los derechos de la comunidad LGBTTIQ+, que tambien defendieran la vida de los aún no nacidos.
Desde su radicación, el proyecto sobre el aborto pareció crear dos bandos, uno de ellos respaldado por el sector religioso del país. En los esfuerzos por influenciar la votación, exigieron a Rivera Schatz que votara a favor de la aprobación de la medida o le votarían en contra durante las próximas elecciones.
El Presidente del Senado, en cambio, aseguró en la sesión que votaba a favor sus propias creencias y no porque nació una campaña del sector religioso para presionarlo.
'Llegaron inclusive a decir esa gente 'nos vemos en las urnas'. Estoy cansado de verlos ya en tres primarias y seis elecciones. Que voten como les de la gana porque mi conciencia yo no la negocio con nadie y no creo en el aborto independientemente de lo que diga esa gente', tronó Rivera Schatz.
Su correligionario del PNP, Ángel 'Chayanne' Martínez Santiago, catalogó la medida como una iniciativa para defender la vida, postura que defendió mientras aguantaba en sus manos una figura de un feto en un vientre. Itzamar Peña Ramírez y Margarita Nolasco Santiago, tambien del PNP, se hicieron eco de la postura sobre defender la vida e insistieron en que no le encontraban el carácter restrictivo a la medida.
Carmelo Ríos Santiago, por su parte, catalogó como apropiada la discusión en plena conmemoración de la Semana de la Mujer, algo con lo que el senador del PPD, Eduardo Bhatia Gautier, mostró oposición.
Según la medida, las violaciones al PS 950 serán de $10,000, dinero que será destinado a una 'campaña educativa sobre las opciones disponibles que tiene la mujer como por ejemplo, la opción de adopción'. En esa línea, el senador Cirilo Tirado Rivera cuestionó la eliminación de la educación sexual de las escuelas, además del uso del dinero de las multas para estos fines sin considerar que otros servicios dirigidos hacia la mujer podrían tener mayor prioridad.
En los cambios propuestos, el senador Miguel Romero Lugo solicitó que el concepto 'menores de edad' en el PS 950 se refiera a menores de 18 años. Esta aclaración aplica a uno de los artículos de la medida, que dicta que las menores de edad no emancipadas no pueden someterse al procedimiento sin su consentimiento escrito y el de una de las siguientes: de su padre o madre con patria potestad o su tutor o custodio legal.
En caso de no contar con esos permisos, la menor de edad podría solicitar a un tribunal una resolución a su favor, caso que tendría que ser atendido en un máximo de tres días, tiempo tambien enmendado por Romero Lugo. Originalmente, el proyecto decía que debían ser cinco días.
Discusión de política pública sin público
Mientras se llevó a cabo la discusión de los proyectos de ley, las gradas del Capitolio estuvieron vacías porque estaban cerradas al acceso público.
'Si yo tengo que cerrar las gradas para que no vengan imprudentes aquí a gritar, yo lo hago. Yo no me escondo. Quiero dejar clarísimo que si no tenía que cerrar las gradas por lo que me dijeron los secretarios, yo lo hacía. Yo no necesito una excusa', exclamó Rivera Schatz.
El Presidente del Senado comunicó que el cierre se debió a unas filtraciones en el techo descubiertas ayer.
En las afueras, grupos opositores al PS 950 se manifestaron en contra de su aprobación. Las participantes aseguraron que perdieron fe en detener el proyecto en la legislatura y optaron por poner sus esperanzas en manos del gobernador Ricardo Rosselló Nevares.En un comunicado de prensa, la American Civil Liberties Union (ACLU) rechazó las afrontas del Senado en contra de la transparencia.
'En Puerto Rico, las vistas legislativas son públicas y uno de los preceptos medulares en
todas las democracias del mundo es que los asuntos legislativos se manejan abiertamente,
fuera de la oscuridad y no a espalda del pueblo. El trabajo debe ser transparente y a puertas
abiertas', subrayó el grupo.
Las únicas opciones para seguir la vista eran a traves de la página web y las redes sociales del Senado, disponibilidad defendida por Rivera Schatz, y por la prensa.
Cambios a última hora en 'terapias' de conversión
En cuanto al PS 1000, la autora Laboy Alvarado introdujo una enmienda en sala que pareció amarrar los votos a favor de los coautores de la medida, quienes habían expresado sus reservas con el proyecto de ley tras sus cambios esta semana.
Previo al debate, la Senadora del PNP planteó que el proyecto de ley debía reflejar lo que fue su propósito inicial para radicar la medida: prohibir la práctica de las terapias de conversión en la Isla. En la nueva versión, revelada el pasado martes, la medida dejaba la puerta abierta para estos actos, particularmente a ser realizados por personas ajenas a la profesión de la salud, como los pastores.
'[La enmienda] no es que modifica, sino que aclara que cuando se habla aquí de 'tratamientos o consejos', no pueden ser terapias de conversión, porque ese es el propósito de este proyecto', explicó Laboy Alvarado a preguntas de Bhatia Gautier, uno de los coautores.Además de Bhatia Gautier, los senadores Vargas Vidot y Dalmau Ramírez --tambien coautores-- se mostraron satisfechos con los cambios y votaron a favor.
Laboy Alvarado confesó que el proyecto no era perfecto, pero componía un paso importante en la historia de la Asamblea Legislativa.
Algunos votos en contra al PS 1000, consignados en sala, fueron Martínez Santiago, Peña Ramírez y Venegas Brown.