Cámara, en votación final, derrotó medida que despenalizaba posesión de marihuana
Tras una acalorada discusión, y luego de que el proyecto 1037 fuera aprobado inicialmente a viva voz, el cuerpo determinó finalmente rechazar la pieza legislativa.
La Cámara rechazó finalmente anoche en votación final el proyecto 1037 (había sido aprobado inicialmente a viva voz), que despenalizaba la posesión simple de marihuana y que había sufrido un cambio drástico en la sesión ordinaria: la pieza legislativa, tras una enmienda en sala, bajó de 14 a 5 gramos la cantidad de cannabis para eximir a cualquier persona de sanciones penales, arrestos o procesos judiciales.
La pieza legislativa recibió 19 votos a favor, 26 en contra y dos abstenciones.
La derrota de la medida -cuya discusión demandó gran parte de la sesión ordinaria de ayer- coincidió con la decisión de hace unos días del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, de eliminar los cargos federales por posesión simple de marihuana.
El indulto benefició a miles de personas condenadas, aunque la marihuana recreativa ya es legal en 19 estados de Estados Unidos y Washington DC (el uso médico del cannabis es legal en 37 estados y tres territorios estadounidenses).
Sobre el 1037, el autor de la medida, el representante Orlando Aponte Rosario defendió sin resultado la pieza legislativa en el hemiciclo: “Sustituye la pena de cárcel por unas multas administrativas. El proyecto se nutrió de enmiendas, en las que se recomienda que se acoja a una persona reincidente con marihuana, en lugar de exponerse a un procedimiento criminal, donde fondos públicos son desembolsados, este proyecto pretende que se cree unos programas de desvío y orientación para estas personas”.
Explicó que para tener el apoyo del PNP, “hemos acogido sus recomendaciones y vamos a proponer una enmienda a los fines de que aunque en el proyecto original se hablaba de 14 gramos, que se sustituya por cinco gramos o menos”, pero al final no tuvo el respaldo.
“Nadie quiere ver una sociedad adicta a ninguna clase de sustancia. Mi invitación es a que atendamos estos problemas sociales, problemas salubristas… Mi invitación es a basarse en estudios y no en experiencias anecdóticas”, reclamó.
Alertó que “hoy (poseer marihuana) es un delito grave que apareja una pena de seis años. Eso es lo que queremos que se cambie en este caso. Si está asociada al tráfico de drogas, que se procese criminalmente. Pero que los recursos del Estado no vayan detrás de un usuario por tener un cigarrillo de marihuana, que hoy son tres años de cárcel”.
Asimismo, pidió que se hiciera caso “al comandante en jefe del Ejército de Estados Unidos, Joe Biden (quien eliminó los cargos federales a estas personas). Les exhorto a no criminalizar al usuario, a la persona que no comete un delito violento contra terceros. La medida no busca que haya drogas en las calles”.
El representante independiente Luis Raúl Torres Cruz cuestionó de la medida elementos adicionales, como desconocer dónde compran la droga estas personas (opinó que de forma ilegal) y si la Policía va a manejar “máquinas de peso” para determinar el gramaje de la marihuana.
“Aquí estamos legalizando un montón de droga”, apuntó.
El portavoz del PNP, Carlos Méndez Núñez, coincidió con Torres Cruz, dijo que “yo vi 14 gramos de marihuana y es preocupante, no es para uso personal, es para la distribución. Si quieren despenalizar, radiquen un proyecto para eliminar el delito de posesión”.
Agregó que “no quieren reconocer que es en los puntos de drogas donde se va a obtener”.
Mariana Nogales Molinelli, comentó que la medida lo que buscaba era evitar una “pena carcelaria. Pretende evitar que gente entre al sistema de procesamiento criminal. La cárcel es un lugar de mucha vulnerabilidad. No es un proyecto sobre la marihuana”.
Con el paso de las horas, la discusión se tornó acalorada e incluso pudo llegar a mayores después de que un comentario de Aponte Rosario sobre los puntos de drogas generara la reacción de Méndez Núñez, quien encaró al legislador a gritos.
“¡Es una falta de respeto decir a un compañero que tiene un punto de droga en su casa!”, gritó el político del PNP, quien apuntaba al representante del PPD, quien desmentía enrojecido la acusación y terminó yéndose del hemiciclo.
Pese a que despenalizaba el uso personal de la marihuana, el proyecto establecía multas.
Definía que por el primer incumplimiento, la multa sería de $500 dólares, mientras que el segundo contempla el pago de $1,000 y un curso de dos horas sobre uso y abuso de sustancias controladas a cargo de la Administración de Servicios de Salud y Contra la Adicción (ASSMCA).
La tercera infracción señalaba una multa de $1,500 y la obligación de completar un programa de charlas socioeducativas de la ASSMCA, además de servicios comunitarios por un mes.
Los dineros recaudados iban a ser destinados al Fideicomiso del Fondo Dotal de la Universidad de Puerto Rico (UPR).
La medida enmendaba el artículo 404 (a) de la Ley de Sustancias Controladas de Puerto Rico (Ley 4 de 1971).
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