Los cuerpos legislativos se pusieron de acuerdo en un lenguaje que dio paso a su aprobación.

El Senado y la Cámara de Representantes finalmente se pusieron de acuerdo en torno al lenguaje de un proyecto de ley que prohíbe el discrimen en el campo laboral por uso de tatuajes, cabello teñido y perforaciones corporales.

Uno de los autores de la medida, el representante independentista Denis Márquez Lebrón, celebró el paso legislativo. El otro coautor es el representante popular Jesús Manuel Ortiz.

“Con la aprobación del proyecto 1270 logramos que las personas con tatuajes, perforaciones corporales y el cabello teñido adquieran protección legal específica en casos de discrimen laboral y representa, por lo tanto, un avance en los derechos laborales de los trabajadores. Ha sido el resultado del trabajo legislativo que iniciamos desde el cuatrienio anterior para hacer justicia a todas las personas que diariamente son discriminadas en el ámbito laboral, situación que conozco muy bien luego de haber ejercido la abogacía durante años. Como parte del proceso legislativo, me reuní con personas y organizaciones que han reclamado justicia y brindado testimonio del discrimen que han padecido por el mero hecho de tener tatuajes o teñirse el cabello de una forma u otra. Agradezco las aportaciones de Evynette López, Mara Cruz y la organización, Mi estilo no me define. Resta ahora que el Gobernador convierta en ley esta medida como un paso de justicia para los empleados que hoy son discriminados y para ampliar los derechos laborales, una acción cónsona con las aspiraciones para una sociedad más justa y equitativa”, sostuvo Márquez Lebrón en declaraciones escritas.

Entre otras cosas, la medida prohibe que, en ninguna instancia, un patrono pueda suspender, rehusarse a emplear, despedir, afectar negativamente en las evaluaciones de desempeño o de cualquier otra forma perjudicar a una persona en su empleo exclusivamente por tener tatuajes, perforaciones corporales o cabello teñido de colores no naturales.

El proyecto también establece las instancias en que un patrono podrá establecer normas razonables sobre el uso de perforaciones, tatuajes y/o y cabello teñido de colores no naturales.