El Departamento de Corrección asegura que los adiestramientos se realizaron en un área aislada.

Ante una denuncia que llegó a la redacción de NotiCel de vecinos del Barrio El Zarzal Arriba en Río Grande, de que se han visto afectados por las prácticas con gases lacrimógenos en la cárcel El Zarzal, el teniente coronel Giovanni González Rivera afirmó que "nos tomó por sorpresa esa información".

En un correo electrónico enviado a este medio, una persona residente en Barrio El Zarzal Arriba denunció que "los policías practican durante la semana con gases lacrimógenos y afectan a nuestros niños que están tomando sus clases virtuales y tenemos que montarnos en el carro e irnos ya que no podemos con la tos y el ardor en los ojos. Esto lo hacen constantemente. Lo hemos notificado directo a la cárcel pero no hacen nada".

González Rivera, miembro del equipo de seguridad del Departamento de Corrección, aceptó que los adiestramientos se realizaron por cuatro semanas corridas pero que solo fueron los lunes concluyendo hoy. Aseguró además que fueron en un área aislada y negó que hayan recibido denuncias de los vecinos.

"Fueron cuatro lunes, solamente los lunes. Desde el lunes 5 hasta el día de hoy fueron cuatro adiestramientos en conjunto con la Policía de Puerto Rico. Eso es parte de los requisitos que tenemos nosotros de adiestrar los oficiales tanto de nosotros como de la policía y estábamos haciendo unas prácticas con agentes químicos o gases lacrimógenos en la institución que está cerrada en el área de la cancha, que es la institución que queda en la parte arriba de la montaña", sostuvo González Rivera a NotiCel.

“Ahí hay dos instituciones, una que está cerrada y una que está abierta. Por lo menos en la que está abierta yo estuve llamando al Superintendente y ahí no hemos recibido ninguna queja de ningún ciudadano quejándose de los adiestramientos. Esa área (en la que se hicieron los adiestramientos) está aislada completamente, está bajo techo y se hacen unas prácticas lanzando unos proyectiles de gases lacrimógenos, que tampoco se lanzan muchos. Por los protocolos de Covid solamente podíamos enviar cinco de los oficiales de custodia y la misma cantidad de la Policía de Puerto Rico".

No obstante, si en ese lugar se vuelven a realizar estas prácticas, González Rivera manifestó que "vamos a tomar en consideración esta queja que dio alguno de los vecinos allí. Pero yo exhorto que si alguien de la ciudadanía se vio afectado que se identifique para uno tener una información más certera".