Asesores alegan que Trump tiene problemas para respirar, aunque este asegura sentirse "genial"
"Me siento genial". Así describe el presidente Donald Trump su condición de salud en medio del COVID-19 que padece, pese a que los asesores que lo rodean apuntan a que ha tenido problemas para respirar.
Desde que salió del hospital Walter Reed el pasado lunes, el Mandatario ha minimizado su condición y hasta ha puesto en peligro a su equipo de trabajo a tal grado, que rompió la cuarentena que debe llevar, y ayer regresó a trabajar desde el Despacho Oval.
Pero una de las cosas que más sorprenden es que Trump ha vociferado que "no creo que sea contagioso, en absoluto". Basado en esa creencia, el Presidente dijo que esperaba debatir el 15 de octubre con su opositor demócrata, Joe Biden. Pero no aceptó un debate virtual, sino que quiere uno presencial.
“No voy a perder el tiempo en un debate virtual. De eso no se trata el debate", dijo a la cadena Fox en una entrevista esta mañana.
El médico de Trump alertó que el Presidente todavía no está fuera de peligro, puesto que los pacientes de la enfermedad están en especial riesgo durante entre siete y diez días desde que se registran los primeros síntomas, algo que en el caso del Presidente ocurrió supuestamente el pasado jueves. De hecho, asesores que han preferido no identificarse apuntaron a diarios como CNN y el New York Times, a que este ha tenido problemas para respirar.
Pese a ello, Trump continúa desafiando la enfermedad y apunta a que en su caso, el COVID-19 fue "un regalo del cielo".