Se repite la historia en la AEE: Débil sistema tropical deja a miles sin el servicio
Las ráfagas del sistema tropical provocaron apagones alrededor de la isla
Kathia Molina y Davian Ríos han superado sus propios límites. La pareja de hermanos radicados en Arecibo describió el paso del fenómeno atmosférico como uno de los retos más grandes que han tenido que enfrentar, a raíz de la pandemia del COVID-19 que les obligó a mantenerse distanciado.
Sin embargo, y a pesar de la distancia, ambos llegaron a la misma conclusión: una vez más, el paso cercano de un sistema tropical fue suficiente para dejar al descubierto la fragilidad del sistema de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE).
"Siempre pasa lo mismo. Dicen que el sistema está mejor después de (el huracán) María, pero ya vimos que no", expresó Molina a NotiCel mediante videoconferencia, mientras acomodaba un puñado de alimentos no perecederos en su alacena.
“Y lo peor de todo es que se cantan como los más listos. En vez de ser claros con la realidad de que el sistema no vale na'. Por eso es que la van a vender”, comentó Ríos por su parte en la misma llamada.
Precisamente, mientras el fenómeno hacía su entrada al Caribe, sin haber mediado lluvia alguna sobre la isla, un apagón dejó a unos 400 mil abonados de la AEE sin el servicio.
A 48 horas del evento, la raíz del fallo eléctrico sigue siendo un misterio para el propio director de la AEE, José Ortiz, quien planteó que el apagón pudo tratarse de un sabotaje interno.
Molina de 29 años y quien es madre de un niño de cinco años entendía el paso del devastador huracán María dejó suficientes lecciones aprendidas. Sin embargo, la pandemia del coronavirus alteró el protocolo de preparación.
"Escuchamos a la gobernadora y funcionarios del gobierno decir que lo primero es acudir a la casa de un familiar, antes de pensar ir a un refugio, pero la realidad es que con esto del covid, no me sentía segura ir a la casa de ningún familiar porque yo no me he hecho ninguna de las pruebas", manifestó Molina.
Añadió que las medidas de prevención que hay que tomar para prevenir el contagio del coronavirus añadió otra capa de inestabilidad emocional a la hora de abastecerse de suministros. "Tuve que prepararme más mentalmente porque el protocolo en las tiendas ahora con el Covid es totalmente distinto y no tenías a nadie ayudándome. Honestamente, fue bien drenante emocionalmente", expresó.
Debido a las medidas de distanciamiento físico, el COVID-19 también trastocó incluso la coordinación del gobierno a la hora de facilitar un refugio a los ciudadanos. En San Juan, la alcaldesa Carmen Yulín Cruz Soto redobló la cantidad de los principales refugios.
Anoche el refugio más concurrido fue el que Cruz Soto habilitó para personas sin hogar, en la comunidad El Gandul. Al cierre de esta edición, la alcaldesa informó a NotiCel que unas 10 personas sin hogar acudieron al refugio.
Posteriormente, tras la entrada del fenómeno, que todavía se mantenía como potencial ciclón tropical, la gobernadora Wanda Vázquez Garced supo a través de un recorrido por el centro de operaciones Monacillos de la AEE en Río Piedras que las ráfagas de hicieron daños al tendido eléctrico, dejando a sobre 150 mil abonados en la zona norte sin el servicio de energía eléctrica.
Cuando el sistema se encontraba a unas 300 millas de Ponce, la región con más abonados sin servicios es Mayagüez con 32,500 sin luz, reportó el presidente de la Unión de Trabajadores de la Industria Eléctrica y Riego (UTIER), Ángel Rafael Figueroa Jaramillo.
A medida que el sistema continuaba su ruta por el sur de la isla, las brigadas de la AEE continuaban trabajando para restablecer el servicio. "Hasta este momento se encuentra aproximadamente 75 mil abonado sin servicios. Siguen las brigadas trabajando hasta que las inclemencias del tiempo lo permitan", expresó Figueroa Jaramillo.