Brote de COVID-19 en la cárcel de Ponce
Nueve empleados han dado positivo en las pruebas
La secretaria del Departamento de Corrección y Rehabilitación (DCR), Ana Escobar Pabón, canceló ayer miércoles las visitas familiares en el Centro de Tratamiento Social de Ponce (CTS) luego de que nueve empleados de seguridad arrojaron positivos en la prueba de COVID-19.
“El rastreo de los casos nos lleva a un empleado cuyo hijo dio positivo a COVID-19 y lo contagió. A su vez este empleado no siguió el protocolo establecido y se presentó a trabajar. Entre los contagiados tenemos siete compañeros que pertenecen a la Unidad de Operaciones Especiales, un oficial de servicios juveniles y un coordinador de prevención de incendios. Todos estos empleados están vacunados. Por otro lado, hoy y mañana viernes vamos a hacerle pruebas a todo el personal que labora en esta instalación”, sostuvo Pabón Escobar.
La secretaria del DCR notificó que desde el pasado lunes, cuando se reportó el primer caso, el DCR tomó las medidas de precaución necesarias para evitar más contagios. Dijo además, que se decretó un cierre de la institución y se suspendieron los traslados y los ingresos de menores a esta institución.
“Cancelamos las visitas hasta nuevo aviso y se notificó a todos los familiares de los menores. Trabajamos de la mano de los epidemiólogos del Departamento de Salud asignados al DCR y Physician Correctional y hoy, todos los jóvenes que están ingresados en el centro van a ser sometidos a la prueba de detección de Covid-19 a pesar de que no estuvieron en contacto con el personal positivo al virus. Confiamos que el cierre concluya en los próximos 10 días. Es importante informar que hasta el momento ningún menor ingresado en este CTS presenta síntomas asociados al virus”, concluyó.
Al momento el 95 por ciento de los empleados del DCR está vacunada, así como el 95 por ciento de la población correccional.