Celebran en Comerío vida y obra de fenecido Obispo Antulio Parrilla Bonilla
Un grupo de fieles inició los trámites para solicitar que se abra un proceso para su posible beatificación.
Niños, jóvenes y adultos se congregaron desde horas de la mañana de hoy, Día de Reyes, en la Plaza de la Trova de Comerío para participar en una Misa para celebrar la vida y obra del líder religioso y comunitario, el fenecido Obispo Antulio Parrilla Bonilla.
Al acto asistió una importante representación de la “Comisión pro Beatificación del Obispo Parrilla Bonilla’’, quienes se preparan para brindar próximamente informes a la Conferencia Episcopal Puertorriqueña (CEP) en camino a solicitar luego que se abra el proceso de beatificación.
El acto fue coordinado por el grupo “Misión Joven” de la parroquia Santo Cristo de la Salud del mencionado municipio, según se indicó.
“Cada año queremos crear conciencia a nuestros niños y jóvenes sobre el testimonio y legado desde lo que llamamos “santidad social” como expresión del camino al que estamos llamados los cristianos. Y, obviamente Monseñor Parrilla, quien fuera Obispo auxiliar de nuestra diócesis de Caguas y cofundador del proyecto cooperativista en Puerto Rico fue un gran testigo del camino de santidad y es un referente de trascendental importancia al momento de referirnos a los pastores de la Iglesia boricua”, expresó el Padre Pedro R. Ortiz, párroco de la localidad, en declaraciones escritas.
El Obispo Antulio Parrilla nació un 6 de enero de 1919 en San Lorenzo. Fue sacerdote jesuita, educador, luchador por la justicia social y propulsor del movimiento cooperativista en Puerto Rico. Entre sus aportaciones se observa el trabajo social realizado en las comunidades.
Según se indicó, la celebración litúrgica estuvo llena importantes signos y símbolos litúrgicos aplicados a la realidad de nuestro tiempo. Entre los que destacan, el ofrecimiento de los niños y niñas al inicio de la Misa para adorar al Niño Jesús. Llegaron con tres regalos significados en los valores claves que el obispo Parrilla practicó: Humildad, Compasión y Bondad.
De igual manera, según el trabajador social Nelson Cotto, “realizaron un juego 'cooperativo' para llevar el mensaje de que en el proyecto de vida 'TODO el MUNDO CABE PARTICIPAR', nadie debe ser excluido de la gran Mesa social. De igual modo, reconocieron la gran importancia del diálogo y apoyo Inter-generacional al presentar a sus mayores como ejemplos vivos de la educación integral y la fe''.
La experiencia litúrgica y comunitaria concluyó cuando los niños y jóvenes se confundieron en un abrazo alrededor de la imagen del Obispo Parrilla para expresar el cariño y el camino a seguir en la evangelización social de la Iglesia sinodal.