Mujeres demostrarán que si ellas paran 'el país se detiene'
El 8 de marzo, Día Internacional de las Mujeres Trabajadoras, las mujeres de Puerto Rico se unirán a los esfuerzos de lucha y celebración de más de 55 países en el Paro Internacional de Mujeres.
Renunciarán, sea por una hora o por el día completo, las labores de estudio, consumo y trabajo remunerado o doméstico como forma de demandarle al pueblo y al gobierno que se den cuenta el impacto que recibiría el país sin la aportación de ellas en todos sus ámbitos. En caso de no poder unirse al paro, usarán ropa o accesorios violetas, harán actividades y boicotearán a los misóginos.
Además, lucharan en contra de la violencia física, verbal, económica y moral dirigida a ellas en las calles, los trabajos, las escuelas y en las casas por parte de las instituciones de gobierno que no atienden sus demandas, instituciones religiosas que intervienen en el desarrollo de la perspectiva de género y derechos trans y también en contra de funcionarios públicos acusados de hostigamiento sexual u otros actos sexistas que han sido respondidos 'tímidamente'.
'Pero eso es solo un ejemplo de la violencia que reciben las mujeres en diferentes instancias', expresó Yanira Reyes, de la Comisión de la Mujer del Colegio de Abogados de Puerto Rico sobre el caso de hostigamiento sexual que trascendió del alcalde de Guaynabo Hector O'Neill.
'Desde el gobierno vimos una respuesta muy extraña y tímida de parte de la Secretaria del Departamento de Justicia y de la Oficina de Ética Gubernamental. Esto es parte de lo que llamamos violencia institucional. Cuando las mujeres necesitan respuestas de las instituciones gubernamentales, la respuesta es tímida y poco efectiva. Ahora, vimos una respuesta más fuerte y estamos más satisfechas', añadió Reyes, también miembro de la junta del Instituto de estudios de mujer, género y derecho Inter-mujeres de la Universidad Interamericana.
Sin embargo, las mujeres también celebran que la fuerza está en los números y en la diversidad de cuerpos y expresiones del género y que no aceptarán pasivamente las medidas de austeridad que ha implementado el gobierno, como la reforma laboral, que impacta a todos, pero particularmente a las mujeres ya sea por la brecha salarial que existe actualmente entre los sexos o porque, generalmente, las mujeres ocupan los trabajos de menor remuneración y menor poder en las estructuras públicas o privadas.
Hace cuatro meses la Coalición 8 de marzo (C8M) anunció que se aproxima un paro y convocó a todos los aliados a unirse sus demandas de parar labores o a diversas actividades que se estarán celebrando alrededor de la isla.
Desde la Universidad de Puerto Rico se propuso hacer un paro del Recinto en apoyo al Paro Internacional. Pasquines regados por algunas áreas de San Juan y distribución de boletines urgen al apoyo del también llamado 8M. Un grupo de mujeres hizo una marcha por la Avenida Universidad anunciando que lucharán 'en la calle y en la cama'.
En San Juan las mujeres se harán sentir desde temprano con desobediencia civil y luego un Sal pa' Fuera en la Universidad de Puerto Rico, Río Piedras. Culminará en una manifestación frente al UBS en Hato Rey donde todo el país ha sido convocado a manifestarse.
De igual forma, grupos LGBTTQ se han unido al Paro Internacional de Mujeres y el municipio de San Juan también mostró apoyo al paro otorgándoles a sus empleados la posibilidad de unirse al paro a las 11:00 am.
Por qué se sigue luchando?
Las mujeres han luchado a lo largo de la historia por la igualdad de derechos y la equidad de trato a aquellos que han sido siempre privilegiados. Desde ganar el derecho a voto en Estados Unidos en 1920 hasta la marcha de miles de mujeres en Washington D.C. este año, las violencias y discrímenes por razón de sexo o género siguen siendo parte de la cotidianidad de todo tipo de mujeres, niñas y trans.
En el 2017, los reclamos feministas son interseccionales, (que incluyen raza, clase, religión, orientación sexual, etc), y también son 'queers', (que incluye toda forma de otredad a la norma impuesta).