El portavoz de la minoría en la Comisión Cameral de Salud, Gabriel Rodríguez Aguiló, hizo un llamado el jueves a los comerciantes del Viejo San Juan para que adviertan a los consumidores de las graves consecuencias de mezclar bebidas energizantes con alcohol durante las Fiestas de la Calle San Sebastián.

'Se ha comprobado lo dañino y perjudicial que puede ser para la salud esta mezcla y sin embargo hemos visto que se está patrocinando la misma. Ahora en la Fiestas de la Calle San Sebastián se debe hacer un alerta y el Departamento de Salud debe orientar a esos efectos', expresó Rodríguez Aguiló en declaraciones escritas.

El pasado vicepresidente Cameral instó a la población, mayormente a los jóvenes, a que no consuman estas bebidas energizantes e incluso exhortó a los comercios a que instalen rótulos advirtiendo de los efectos adversos de estas bebidas o simplemente a que no las vendan para evitar intoxicaciones u otros daños a la salud durante las festividades.

'En años anteriores se han reportado intoxicaciones, principalmente, entre jóvenes que consumen las mezclas de alcohol con estas bebidas energizantes provocando, según los estudios, arritmia cardiaca y estimulación de episodios de alta presión, que pueden tener incidentes trágicos como la muerte. No quisiéramos que vuelvan a ocurrir situaciones lamentables en estas fiestas de San Sebastián, por eso hacemos la advertencia', indicó.

En el 2009, el representante hizo una investigación legislativa por la intoxicación de jóvenes en las fiestas de la Calle San Sebastián. En ese momento, esa pesquisa evidenció los alegados efectos graves de las bebidas energizantes, en especial la de wasikouki, que usualmente se mezcla con licores fuertes como el whisky.

Explicó que las bebidas energizantes tienen un ingrediente que ayudan a mantenerse alerta, que es la cafeína. El consumo en exceso de estas mezclas enlatadas aumenta la presión sanguínea, la cual es peligrosa para las personas que padecen alta presión. El consumo de las mismas en el ejercicio pueden contribuir a la deshidratación.

Estas bebidas energizantes contienen altas concentraciones de azúcar y pueden trasmitir una sensación de bienestar y energía, pero el estímulo no es duradero y puede desencadenar en una pérdida súbita de energía.

Señaló que la costumbre de mezclar bebidas energizantes con alcohol, tiene como peligro que la bebida energizante retrasa los efectos depresivos del alcohol, mientras aumenta su absorción, por lo que la persona consume una cantidad mayor de alcohol y aumenta sus efectos. Se han registrado casos de jóvenes que han sufrido ataques cardiacos y cerebrales al mezclar estas bebidas con el alcohol.