En la calle, el recuerdo de la denominada medicina amarga instaurada en el 2009 por el gobernador, Luis Fortuño, todavía cala hondo y evoca un sinsabor entre algunos ciudadanos y ciudadanas de Puerto Rico.

Ante el actualfrágil cuadro fiscal y el debate en torno a la implementación de nuevas medidas de disciplina presupuestaria, la ansiedad y pesimismo se vuelven a adueñar de personas que cuestionan si la elección de un nuevo gobernador debe interpretarse como sinónimo de cambio en el desarrollo de política pública dirigida al área económica.

NotiCel realizó un sondeo informal entre algunas personas que se dieron cita hoy en un concurrido festival artístico de la capital.

Todos coincidieron en que el nuevo gobernador, Alejandro García Padilla, tiene ante sí el reto de demostrar que bajo su gobierno no van a mandar los mismos sectores poderosos que por décadas han asesorado e influido en la gestión de los dos partidos de mayoría.

Además, las personas que le hablaron a este medio digital aseguraron que el nuevo cuatrienio traerá alguna nueva versión o secuela de la medicina amarga del 2009.

'La medicina amarga va a suceder nuevamente. El déficit está ahí y no se puede mentir ni tapar la realidad presupuestaria del país y del mundo entero. En todo caso, el reto es que estas decisiones se tomen de la manera más consciente y sensible, que no despidan gente como se hizo en el 2009, ni comience una cacería para sacar de sus puestos a los que piensan distinto al gobernador', dijo a NotiCel, Jorge Carazo, quien tiene su propia consultoría en el ejercicio de su profesión como abogado.

Carazo, además, lamentó que uno de los principales asesores del gobierno entrante en materia legal, lo sea el bufete legal de McConnell Valdés, grupo que también trabajó con la administración de Fortuño en el desarrollo de su política fiscal que desembocó en la aprobación de la Ley 7 y otras medidas neoliberales.

'McConnell Valdés tiene una base de clientes tan grandes, que cuando este bufete asesora al gobierno, uno no está seguro a quién realmente responden. Por qué el principal asesor del gobierno tiene que ser un bufete tan grande?', cuestionó Carazo, quien es de Bayamón.

Otra persona que expresó su preocupación ante la llegada de una nueva medicina amarga lo fue María Mercedes Negrón, quien llegó desde Juana Díaz a la capital para disfrutar de la Feria de Artesanía 2012.

'Si se llega a concretar eso que dicen de alzar la luz y el agua, se crearía un caos debido a que somos de los de clase media quienes siempre pagamos los platos rotos. Por lo que veo, va a pasar lo mismo que con Fortuño. Por lo que hizo en el 2009, a Fortuño lo castigaron en las elecciones. Qué le van a hacer a García Padilla?', expresó Negrón.

Sin embargo, no todas las personas se mostraron pesimistas.

Por ejemplo, la toabajeña, Francisca Echevarría, guarda la esperanza de que García Padilla traiga un cambio y mejore la situación económica del país, sin tener que llegar a las mismas medidas antipáticas implementadas por su predecesor.

'Yo pienso que el nuevo gobernador se mantiene firme en sus promesas de campaña de no despedir empleados ni aumentar los costos de servicio, podrá hacer un buen trabajo. Por supuesto, no va a ser nada fácil, debido a la situación caótica que se vive actualmente', comentó Echevarría.

El esposo de Echevarría, Juan Ayala, no pareció estar muy convencido con el planteamiento de su esposa y fue enfático en rechazar las promesas hechas por la administración entrante.

'Todos los políticos son unos HP que se trepan al poder y roban porque lo han convertido en un estilo de vida. Aquí hace falta una revolución ya que no hay una desde el 1950', mencionó un pesimista Ayala, mientras hacía referencia a la revuelta del Partido Nacionalista al inicio de la década de los 1950's.