Qué pasó hoy? (vídeo)
Martes 12 de junio de 2012 ? Aniversario 186 de la fundación de Comerío
Un día como hoy, hace 186 años, se fundó oficialmente el municipio de Sabana del Palmar, o según lo conocemos hoy en día: Comerío.
Haya en el 1826, en la Hacienda el Palmar, se funda oficialmente el municipio de Sabana del Palmar a partir del visto bueno que brindó el entonces Gobernador Don Miguel de la Torre. En su paso a ser reconocido oficialmente como municipio, Comerío contó con varios vecinos de lo que hoy son los municipios de Bayamón, Cidra y Barranquitas que deseaban separarse de sus respectivos pueblos para formar uno propio ya que éstos no contaban con prerrogativas y acceso a prestaciones esenciales, tales como acceso a un sacerdote, servicios fúnebres y la capacidad de impulsar el comercio mediante el apoyo que pudieran encontrar en un ayuntamiento más cercano a éstos y sensible a sus necesidades.
El nombre que llevó Comerío al momento de su fundación, Sabana del Palmar, se debió a la gran cantidad de Palmas Reales que existían en las tierras que componían ese nuevo municipio. Sin embargo, su nombre se cambió a Comerío en 1894, por decreto expedido por la Monarquía de España, en donde se le daba ese nombre en honor al Cacique Comerío, quien había participado en el alzamiento general de nuestra población taína allá para 1511.
Por muchas décadas antes y después de su fundación, lo que hoy conocemos como Comerío llenó sus arcas a base de la actividad económica que generaba la entonces prometedora cosecha y procesamiento de la hoja del tabaco. Eventualmente, este municipio también conocido como 'La Perla del Plata' o 'El Pueblo de los Guabaleros', se dio a conocer mundialmente por el tabaco que se produjo a gran escala en su fértil tierra. De hecho, gracias a municipios como Comerío, Puerto Rico se colocó como uno de los mayores suplidores de este producto en el toda la cuenca del Caribe. Asimismo, gracias a sus cuerpos de agua, tales como el del Río Blanco y el Salto de Comerío, este municipio empezó a generar sus propia electricidad a inicios del siglo XX, supliendo de este importante servicio a otros municipios a su alrededor.
Entre las festividades que se celebran en este pueblo que se nutre del Río La Plata, se encuentran el Maratón El Seco, el Festival Jíbaro, el Carnaval de Primavera, Festival El Jobo, las Fiestas Patronales de San Andrés Apóstol, la Fantasía de Navidad, y el Festival Cuevas de La Mora.
El distinguido autor puertorriqueño, el cagüeño Abelardo Díaz Alfaro, laboró algún tiempo como trabajador social en Comerío, lugar donde encontró la musa para muchas de sus memorables narrativas basadas en nuestra sociedad jíbara y su heroica resistencia ante el embate que supuso el intento por cometer genocidio cultural contra la Nación Puertorriqueña, mediante la campaña de suplantar nuestro idioma e identidad, al imponer la enseñanza del inglés y las tradiciones estereotipadas de Estados Unidos en nuestro currículo escolar.
Vale tener presente a los comerieños distinguidos a lo largo de la fecunda historia de este pueblo que forma parte integral de la Nación Puertorriqueña, ente los que se encuentran: Manuel A Pérez, José Ramón Figueroa Rivera, Claudio Torres, Juana Colón, Juan Agosto Alicea y Celestino J. Pérez. Admás,
Hoy, en el día de la fundación de este centenario municipio, cobra aún mayor vigencia que nunca la gesta de reivindicación y reafirmación de lo que constituye la fibra y esencia de nuestra Nación Puertorriqueña que se libró y se ganó en municipios a lo largo de todo Borinquen, incluyendo Puerto Rico. Puesto que en días recientes, el Secretario de educación anunció que se recurrirá nuevamente a dicha errada estrategia por suplantar nuestra cultura nacional mediante el recrudecimiento de la utilización de los fondos destinados a nuestra instrucción pública como instrumento de lo que constituye un intento de cometer genocido cultural, evocamos una de las respuestas que brindaron nuestros indómitos jíbaros ante el tan gastado y torcido propósito del régimen colonial imperante en su obstinada meta de transformarnos en algo distinto a la identidad que compone nuestra centenaria Nación Puertroriqueña:
'Y de pronto surgió en el umbral de la puerta la rojiblanca figura de Santa Claus con un enorme saco a cuestas, diciendo en voz cavernosa: 'Here is Santa, Merry Christmas to you all!'
Un grito de terror hizo estremecer el salón. Unos campesinos se tiraron por las ventanas, los niños más pequeños empezaron a llorar y se pegaban a las faldas de las comadres, que corrían en desbandada. Todos buscaban un medio de escape. Y Mister Rosas corrió tras ellos, para explicarles que él era quien se había vestido de tan extraña forma; pero entonces aumentaba el griterío y se hacía más agudo el pánico. Una vieja se persignó y dijo: 'Conjurao sea! Si es el mesmo demonio jablando en americano!'
El supervisor hacía inútiles esfuerzos por detener a la gente y clamaba desaforadamente: 'No corran; no sean puertorriqueños batatitas. Santa Claus es un hombre humano y bueno.'
A lo lejos se escuchaba el griterío de la gente en desbandada. Y míster Escalera, viendo que Peyo Mercé había permanecido indiferente y hierático, vació todo su rencor en él y le increpó a voz en cuello: 'Usted, Peyo Mercé, tiene la culpa de que en pleno siglo veinte se den en este barrio esas salvajadas.'
Y Peyo, sin inmutarse, le contestó: 'Míster Escalera, yo no tengo la culpa de que ese santito no esté en el santoral puertorriqueño.''
-Abelardo Díaz Alfaro, citado de su magistral cuento: 'Santa Clo va a La Cuchilla'
Para más información histórica, sigue a Hans Perl Matanzo y a Ana Gabriela González Oliva en Rico Puerto Rico.