Martes, 2 de agosto de 2011 – Primera vez que boricuas conquistan un paso a una Final Olímpica de Pista y Campo

Un día como hoy, hace 63 años, culminaron las Finales de Salto con Pértiga en las Olimpiadas de Londres de 1948.

En dichas Olimpiadas participaron los primeros atletas puertorriqueños en representar a Puerto Rico en unos Juegos Olímpicos. Los dos boricuas que conquistaron dicha honra fueron pertiguistas y muy buenos amigos: José 'Fofó' Vicente Chandler y José 'Joe' Barbosa.

Fofó Vicente y Joe Barbosa tenían que competir en el enorme estado de Wembley, ante un público de 110,000 personas. Fofó nos cuenta que cuando llegó la etapa inicial para 'calificar [a la etapa Final] dividieron a los pertiguistas en dos grupos. Por mi apellido me tocó en el segundo turno por lo cual tuve que esperar una de las tres horas más largas de mi vida, acostado en una cama, en un cuarto solo, cavilando lo 'horroroso' que sería fallar y no calificar.

'El día de las finales amanecí adolorido y más lento que nunca. Llovió e hizo frío durante toda la competencia. Joe [Barbosa] y yo saltamos 13' [pies], igual a la altura lograda por Morcom, el mejor pertiguista de EE.UU. con una marca personal de 14' 8'', pero le afectó el clima. A Morcom le tocó el sexto puesto pues empezó a saltar en 12' y Joe [Barbosa] y yo en 11' 6''. Así él había dado un número menor de saltos que nosotros aunque los tres habíamos saltado la misma altura sin fallar', recordó.

Al final de ese 2 de agosto de 1948, tanto Vicente como Barbosa habrían de saltar la misma altura que el favorito de todos para ganar la medalla de oro, Richmond 'Boo' Morcom. Por cuestiones técnicas de cuántos saltos habían dado previo a su mejor altura superada, tanto Fofó como Joe habrían de ubicarse en un empate para noveno lugar, una gran gesta ya que habrían de terminar entre los mejores diez pertiguistas del mundo, a pesar de las retantes circunstancias que tuvieron que superar.

Así nos lo expone, Vicente, al afirmar que 'la falta de práctica [por los once días de viaje en un barco antiguo] nos hizo mucho daño, pero no hay dolor, luchábamos por Puerto Rico.'

Mientras tanto, Barbosa, expuso que: 'Eso es así, a pesar de que hay dolor en los músculos, no hay dolor para luchar por la patria, después de todo quedamos sextos en el mundo', según lo narra Ramón Muñiz en su libro 'Londres 1948'.

Fofó Vicente le rindió tributo a Javier Culson Pérez al reconocer que éste ha triunfado a un grado tal que es parte de una elite que lo convierte en una de las figuras cumbres de la Historia del Atletismo puertorriqueño y su desempeño a nivel mundial. Y es que, gran ser humano que es, Fofó siempre supo reconocer y apoyar el talento en los otros y enorgullecerse del triunfo de hermanos boricuas, como si fuera un logro tan suyo como del prójimo que despuntaba como él lo había hecho años atrás.

Sobre qué inspiró a Fofó a destacarse en y fuera del deporte, Fofó nos confesó:

'Volar en el aire tenía atractivo, no?' La posibilidad de siempre intentar volar más alto 'formó carácter', 'me dio seguridad'.

Entres sus extensos logros como atleta, Fofó conquistó la medalla de oro en Salto con Pértiga en los V y VI Juegos Centroamericanos y del Caribe celebrados en Barranquilla, Colombia (1946) y en la Ciudad de Guatemala, Guatemala (1950), respectivamente.

Y es, pues, que no debe sorprendernos que Fofó se destacó tanto o más fuera del atletismo en su vida de entrega a potenciar nuestra agricultura y ganadería en calidad de agrónomo. De hecho, fue la primera persona admitida al Salón de la Fama de la Agricultura Puertorriqueña y uno de los pocos en el mundo en ser homenajeados mediante su admisión al 'Hall of Fame' del Servicio Agrícola de Estados Unidos.

'Apreciado Campeón', el término con que lo bautizaron en México durante los VII Juegos Centroamericanos y del Caribe de 1954, resulta evocativo de la característica que definió a Fofó. Ese deseo por siempre querer elevarse más alto por Puerto Rico lo definió como el ciudadano ejemplar que tanto necesita Puerto Rico de los boricuas en la actualidad: preciados campeones que vivan su vida en una constante e inquebrantable entrega por aportar cada vez más al bienestar del país y la calidad de vida de los puertorriqueños.

Su esfuerzo constante siempre se caracterizó por intentar superar sus logros anteriores. Fofó siempre quiso despegar más con cada empuje que dio, tanto en el ámbito deportivo, como en su incansable e inteligente lucha por promover el despegue y viabilidad de nuestra industria del arroz, del café y el ganado.

A través de su afición, vocación y trabajo como atleta, agricultor, agrónomo e investigador incansable, nos inspiró y dejó un rico legado que nos eleva a alturas nunca antes conquistadas. Más importante aún que lo que él logró individualmente resulta ser el valor humano que tiene don José Vicente.

Según lo atestiguó Pedro J. Córdova, miembro de la Academia Olímpica de Puerto Rico:

'Sus logros como profesional en el campo de la agronomía nos deben servir de estímulo para comprender que, con el deporte, se puede llegar 'Más lejos, más alto, más fuerte'. '

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