El año pasado la revista Consumer Report estimó que 20 millones de menores de edad en los Estados Unidos utilizaban Facebook activamente. Para los nativos digitales la interacción en las redes sociales es tan natural en su desarrollo como aprender a correr bicicleta, dar el primer beso, o ir a la escuela. Sin embargo, lo que se ha convertido en un medio tradicional de comunicación, cada vez más encuentra restricciones eticas y políticas, sobretodo cuando se trata de las dinámicas entre estudiantes y maestros en las redes sociales.

Los departamentos de educación en estados como Missouri y Nueva York ya han adoptado políticas que regulan la participación de la comunidad escolar en la red social más popular del planeta. En ambos estados, entre otras restricciones, está prohibido que los maestros sigan o sean amigos de sus estudiantes en las redes sociales. En Nueva York inclusive, se revisan las políticas varias veces al años para que éstas respondan a una realidad cibernética, innegablemente dinámica.

En Puerto Rico comienza a ocurrir lo mismo. José Francisco Benítez, director del departamento laboral del bufete O'Neill <><>& Borges, admitió haber sido contactado por dos colegios privados para desarrollar lo que en inglés se llaman 'social media policies' o políticas de redes sociales. Los modelos que elaboró dijo se asemejan mucho a los que se han adoptado en Estados Unidos, mas lamentó que las leyes federales que existen para fundamentar los mismos datan 'desde que se creó el internet'./p

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La recomendación principal que dio el licenciado es clara; mantener la vida privada separada de la escolar.

'Te doy un ejemplo: A un maestro de 50 años que digamos tiene cien amigos en Facebook y tiene a un estudiante que tiene quince años y esta en décimo grado (pudiera ocurrirle) que un amigo le haga un comentario homofóbico, racista, político o religioso en su página, que pudiera afectar la relación entre el maestro y el estudiante, la relación entre el estudiante y la escuela y la relación entre el maestro y la escuela', señaló.

Las historias de maestros despedidos por fotos o comentarios ventilados en Facebook son innumerables. Algunos casos incluyen el de Ashley Payne, un maestra de escuela superior del estado de Georgia, quien fuera obligada a renunciar luego de que alguien le comentara al principal que en su página de Facebook se habían publicado unas fotos de ella bebiendo durante sus vacaciones. Otro caso, un poco más controversial, pero relacionado, fue el de una maestra de Nueva Jersey llamada Viki Knox que fue despedida de su puesto tras publicar que 'los homosexuales son unos pervertidos pecadores que se reproducen como el cáncer' durante el mes de orgullo gay.

Del mismo modo, el educador pudiera tener acceso a información del estudiante por la que luego sea recriminado al no tomar acción. Para ilustrarlo, Benítez hizo referencia a que puede que un estudiante divulgue o insinúe en su página que está usando drogas y que luego los padres o la escuela le reclamen al maestro por qué no lo informó.

El experto opinó que el que un maestro incluya a sus estudiantes en sus redes sociales implica que éste tiene que comportarse en ellas como se comporta en el salón de clase. No obstante, eso es prácticamente imposible pues el maestro no controla lo que otros puedan ventilar en su perfil.

'Los 'social media policies' establecen que tanto el internet como en cualquier comunicación electrónica los mensajes se deben limitar a fines educativo o extracurriculares como pudiera ser un club o algo relacionado a un equipo deportivo', señaló el licenciado.

Benítez además mencionó que para avisos de esta índole 'durante el día, los maestros tienen alrededor de siete horas para comunicarse con el estudiante y más o menos quince minutos para hacerlo con el grupo entero. Eso es más que suficiente, sino, que espere al próximo día'.

edline.net y Blackboard para la toma de exámenes o 'quizzes' y la discusión de asignaciones. Sobre la participación de los menores en dichos foros, el licenciado recomendó que la escuela debe crear una hoja de relevo para obtener la autorización de los padres.

Según comentó, algunas escuelas optan por utilizan plataformas como

Por su parte Zaima Negrón, portavoz del Departamento de Educación, indicó que los esfuerzos para limitar la interacción entre maestros y estudiantes en las redes sociales en las escuelas públicas del país se enfoca a la restricción de los accesos a las páginas en los predios escolares. 'Todas las páginas que son​ .com están prohibidas a menos que el maestro pida un permiso de uso a la escuela y entonces la Unidad de Tecnología y Currículo evalúa la página. La direcciones que terminan en .org, .edu y .gov, sí están autorizadas'.

El uso de la red está así regulado por un Manual de Uso Adecuado del Internet que es anualmente revisado, discutido en el salón de clases y firmado por los padres de los estudiantes.

La vocero aseguró que aunque existen muchas reglamentaciones para prohibir hasta el uso de los celulares, lo que los estudiantes y profesores hagan fuera del ambiente escolar es muy difícil de monitorear.