Apple señala a sus proveedores
Los Ángeles - La empresa tecnológica Apple hizo público ayer su informe anual sobre las condiciones laborales en sus empresas proveedoras, gran parte localizadas en China, de las cuales la mayoría incumple la normativa que fija un máximo de 60 horas de trabajo semanales por empleado.
El documento 'Supplier Responsability', que la empresa publica anualmente, consta este año de 27 páginas y está acompañado por primera vez de el listado de las empresas proveedoras de Apple, 156 compañías, la mayoría radicadas en Asia, que se llevan el 97 por ciento de la inversión en fabricación de los creadores del iPhone.
Según los datos internos de Apple, solo un 38 por ciento de sus socios auditados para el informe cumplieron con su normativa de 60 horas semanales de trabajo máximo por empleado y en 108 plantas no se pagaban debidamente las horas extra de acuerdo con la ley.
Apple solicitó a sus proveedores que abonaran los salarios pendientes y que cambiaran el actual sistema de pagos para prevenir que se repitieran esas irregularidades.
La compañía californiana, que incrementó las auditorías a sus proveedores en 2011 un 80 por ciento con respecto a 2010, informó que encontró 6 casos de empleados menores de edad en su cadena de producción, si bien constató que los contratos respondieron a controles insuficientes y falta de medios para detectar documentos falsos.
El gigante tecnológico, asimismo, decidió poner fin a su relación con uno de sus socios por continuas violaciones graves de sus regulaciones.
Apple no dio detalles sobre el nombre ni el tipo de infracción de que se trató.
En los últimos años, Apple ha sido objeto de críticas por la situación en la que se encuentran los trabajadores en las plantas productivas que fabrican sus modernos aparatos.
Uno de los mayores proveedores de Apple, la compañía china Foxconn, quedó en evidencia en 2010 por el suicidio de algunos de sus empleados y en 2011 una explosión mató a 4 trabajadores e hirió a 18 en una de sus plantas.
Apple anunció hoy también que pasaba a formar parte de las compañías integrantes de la Asociación de Trabajo Justo y se comprometía a supervisar las condiciones del personal contratado por las empresas que tiene contratadas para la producción de dispositivos.