Lectores electrónicos en el pasado
Dos lectores de libros electrónicos que debutaron en Estados Unidos en mayo tienen algo en común con sus pares de primera generación que salieron al mercado hace cuatro años: sus pantallas siguen siendo en blanco y negro.
Es una de las peculiaridades del negocio de lectores de libros electrónicos. Aun cuando muchos otros aparatos móviles —desde computadoras tipo tableta hasta teléfonos inteligentes— ahora tienen pantallas a color, los lectores electrónicos siguen firmemente estancados en el pasado con monitores en blanco y negro, informa The Wall Street Journal.
Los fabricantes dicen que les gustaría tener pantallas a color para desplegar imágenes de libros, revistas y diarios. El problema es que la producción de pantallas a color de calidad para lectores de libros electrónicos no está en su punto, sostuvo en mayo el presidente ejecutivo de Amazon.com, Jeff Bezos, durante una asamblea de accionistas. Amazon fabrica el lector electrónico Kindle.
La mayoría de los lectores tiene pantallas que usan la llamada tecnología de tinta electrónica, obra pionera de E Ink Corp., de Taiwán. La tecnología usa minúsculas cápsulas rellenadas con partículas blancas y negras cargadas que imitan el aspecto de la tinta sobre el papel. Usa menos energía y parece ser más cómoda para la vista que las pantallas de cristal líquido usadas en muchas computadoras y tabletas.
Pero agregar color a la tinta electrónica es difícil. Si bien E Ink ha comenzado a fabricar algunos monitores a color añadiéndoles filtros de colores, los colores son más apagados en comparación con la pantalla vívida de una tableta, como el iPad, de Apple Inc., sostienen los fabricantes.