“Son vientos, es agua, va a haber interrupciones en el servicio. Esperamos que no, pero vamos, esto es técnico. Cae una rama y te quedas sin servicio", señaló el secretario del Departamento de Estado.

Alrededor de 4,000 clientes de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) se encuentran sin servicio a solo horas del paso de la tormenta tropical Laura por Puerto Rico y ese número podría aumentar, ya que la expectativa de los funcionarios de gobierno es que se registre una interrupción por la lluvia y el viento que traerá consigo el fenómeno atmosférico.

En dos conferencias de prensa separadas para actualizar los preparativos gubernamentales, tanto la gobernadora Wanda Vázquez Garced, como el secretario del Departamento de Estado, Elmer Román González, y el director ejecutivo de la AEE, Efran Paredes Maisonet, coincidieron en el corte repentino podría ser ocasionado por las ramas que caigan sobre las líneas de transmisión.

“En un evento donde vamos a tener vientos sostenidos de 35 a 40 millas por hora, eventualmente los árboles y ramas que caigan van a tumbar líneas. Son eventos mayores. Lo importante y lo que hemos solicitado es la respuesta, cómo vamos a responder lo antes posible”, argumentó Vázquez Garced.

Similar a su predecesor, José Ortiz Vázquez, y cónsono con la visión de la Primera Ejecutiva, el actual Director Ejecutivo interino de la AEE subrayó que no podía anticipar los efectos de la tormenta en la infraestructura eléctrica, sino procurar restablecer el servicio con mayor rapidez. No obstante, no pudo detallar ese plan de acción, porque antes de elaborarlo necesita hacer una evaluación de daños.

“Estamos recuperándonos de un sistema, es normal [que hayan personas sin servicio]. Un disturbio yo no puedo prever, porque no sé qué va a pasar. Es cuestión de cómo vamos a reaccionar a esto y mientras estamos reaccionando, tenemos el sistema operando”, declaró Paredes Maisonet.

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Pese a las fallas esperadas, el funcionario reiteró que la AEE está lista para recibir la tormenta tropical, pues cuenta con abastos de combustible suficientes y materiales en los almacenes.

Ya a eso de las seis de la tarde, se restableció el servicio a 600 personas, por lo que 3,400 continuaban sin servicio.

“Son vientos, es agua, va a haber interrupciones en el servicio. Esperamos que no, pero vamos, esto es técnico. Cae una rama y te quedas sin servicio”, exclamó, por su parte, el secretario del Departamento de Estado, Elmer Román González.

Roberto García, del Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés), fue enfático en que la tormenta tropical Laura dejará una cantidad significativa de lluvia y se proyecta que impacte la Isla con vientos sostenidos de 35 a 40 millas por hora.

“Ahora ya no estamos en sequía y puede hacer que la lluvia cause que los ríos y riachuelos reaccionen de otra forma y que hayan deslizamientos de terreno, especialmente en las laderas del sur, sureste de la Isla. El grueso de esta lluvia se espera entre el sábado en la tarde y domingo en la madrugada, o sea que sería un evento otra vez durante la noche. Extrema precaución, porque en la noche se hace difícil ver inundaciones en ríos o riachuelos”, declaró García.

El experto adelantó que el impacto de la tormenta tropical tendrá el mismo efecto aunque su centro no pase por encima de la Isla.

Mientras, el comisionado del Negociado de Manejo de Emergencias y Administración de Desastres (NMEAD), Nino Correa Filomeno, exhortó a los ciudadanos a que tengan precaución, pues el sistema podría disminuir su velocidad, lo que incrementaría la cantidad de lluvia que deje a su paso.

Durante la conferencia de prensa del gobierno para actualizar los preparativos se afirmó que todas las agencias estaban listas para atender cualquier emergencia.