Así fue el primer día del nuevo gobierno
Todo parecía igual, pero hubo algunas novatadas.
Era el mismo salón, con una enorme puerta de madera. Las mismas mesas con manteles blancos y las sillas espaciadas para garantizar el distanciamiento físico en tiempos del Covid-19.
Pero el podio era diferente.
Ni el tope, ni los lados eran azules. Ahora es marrón a secas.
El pequeño detalle delataba la atmósfera ayer en La Fortaleza. Todo parecía igual, pero cuando se afinaba la miraba se percibían los cambios.
Al filo de las 12:30 de la tarde, por la puerta del Teatro de la Mansión Ejecutiva apareció el gobernador Pedro Pierluisi Urrutia para ofrecer su primera conferencia de prensa desde que juramentó al cargo el pasado sábado 2 de enero.
Vestido de impecable azul y con mascarilla quirúrgica colocó las manos quemadas por el sol sobre el podio, que ahora llevaba un escudo que decía: Gobernador de Puerto Rico. A su derecha, se colocaron la secretaria de la Gobernación Noelia García Bardales, la designada secretaria de Educación, Elba Aponte Santos, y el designado secretario de Salud, Carlos Mellado López. A la izquierda quedaron, el secretario de Desarrollo Económico, Manuel Cidre Miranda y el ayudante general de la Guardia Nacional, José Juan Reyes Peredo, un rostro frecuente en esa tarima durante la crisis salubrista.
Solo había un micrófono sin stand -que todos los funcionarios agarraron con la mano al hablar- y una bocina. El contrato a la empresa que ofrecía estos servicios venció el 31 de diciembre y los nuevos inquilinos del Palacio de Santa Catalina, que llegaron ayer, todavía no lo habían renovado. Tampoco estaba el intérprete del lenguaje de señas por un olvido, aunque la transmisión vía redes sociales mostraba en pantalla el "closed caption" de lo que se decía.
“Es que estamos llegando”, respondió Pierluisi Urrutia a preguntas de un periodista que notó la ausencia del intérprete en la tarima.
Como pez en el agua, el nuevo morador de La Fortaleza y excomisionado residente respondió las preguntas de los periodistas y ofreció detalles de la primera reunión con el gabinete constitucional y con otros miembros de su equipo de trabajo. Habló sin prisa.
Reveló -entre varios asuntos- que comunicó a su equipo de trabajo una nueva política para extender contratos profesionales, que requiere la petición de cualificaciones y la divulgación del nombre de la empresa escogida así como de sus propietarios y principales oficiales.
“Cuentas claras conservan amistades”, apuntó.
“En el Puerto Rico de hoy, no hay tolerancia para excesos. No hay tolerancia para favoritismos. No hay tolerancia para contratos por palancas o amigos”, agregó.
Minutos antes, una empleada nueva preguntaba cómo llegar al Teatro de La Fortaleza, mientras dos empleados movían un anaquel de una oficina a otra. No había mucho movimiento, pero detrás de las puertas -comentó un empleado a NotiCel- los recién llegados acondicionaron sus nuevos espacios de trabajo.
“Estamos llegando hoy (ayer). Todo va a ser evaluado porque hay un grupo de empleados de la confianza del Gobernador que entra a trabajar con él. Así que estamos evaluando las funciones y las necesidades que tenemos”, apuntó Angleró Mojica a preguntas de este medio digital sobre la posibilidad de cambios en el personal de la Masión Ejecutiva.
“Estamos en transición, todavía viendo qué tenemos, qué nos hace falta para poder tomar cualquier decisión”, agregó.
Ayer, Pierluisi Urrutia anunció la designación del exalcalde de Cidra, Javier Carrasquillo, como el secretario de asuntos municipales. Quedan otras cuatro secretarías vacantes por llenar.
Con la transferencia "ordenada y pacífica" del poder gubernamental, a La Fortaleza también se mudó una nueva mascota de nombre Amaia, que ayer todavía no había asomado su cola por el jardín del Palacio de Santa Catalina.
Como un primer día de clases, con una mezcla del freshman class con los seniors, así se estrenó el cuatrienio de la administración Pierluisi Urrutia.