En un nuevo intento gubernamental por reformar el sistema de salud pública, la Administración de Ricardo Rosselló Nevares propone un modelo sin las limitaciones regionales y que presente más opciones al ciudadano.

Sin embargo, y aunque cantidad no es sinónimo de calidad, el Gobierno confía en que esa transferencia de poderes inspire mayor y mejor competencia, con el fin de reducir los costos del servicio a los pacientes del Plan de Salud del Gobierno, conocido como Mi Salud.

Esto, por supuesto, se suma a una de las tantas manifestaciones de la ideología neoliberal que persiste entre la militancia del Partido Nuevo Progresista (PNP), cuya visión recae en que el Estado funge como facilitador de escenarios y situaciones que propicien, entre otras cosas, el libre comercio.

'Lo que queremos es motivar a que los administradores quieran competir y quieran dar mejor servicio a la población porque ahora es la población la que escoge, ellos no escogen la población, así que esto cambia grandemente la manera que se van a estar ofreciendo los servicios', aseguró Ángela Ávila Marrero, directora de la Administración de Seguros de Salud de Puerto Rico (ASES).

Ávila Marrero, en compañía de Rosselló Nevares, explicó que en el nuevo modelo hay cabida para la competencia entre aseguradores de pequeña y gran escala, así como organizaciones sin fines de lucro, como los Centros 330, cuya membresía actual asciende a 400,000 personas.

Ambos funcionarios fueron acompañados por el secretario del Departamento de Salud, Rafael Rodríguez Mercado, y el secretario de Estado, Luis Rivera Marín, para anunciar el inicio del proceso de solicitud de propuestas (RFP, por sus siglas en ingles), con el fin de seleccionar a los nuevos encargados de la atención medica a los 1.4 millones participantes de Mi Salud.

Al ser abordados sobre cómo este nuevo modelo evita los monopolios en la red de servicios, las respuestas del equipo de trabajo redundaban en lo mismo: la existencia de mayor competitividad y el poder del paciente no permitirán que eso ocurra.

'La idea es que se agregue el mayor número de recursos porque al agregar ese mayor número de recursos, tú tienes una mejor oferta, tienes economías de escala, y le puedes reducir el costo al paciente y tienes más competitividad al hacer las alianzas. Ahora hay 'accountability' (responsabilidad), del Gobierno en parte, pero el 'accountability' real es del paciente. A mi no me gusta lo que tú haces, te vas a quebrar', señaló Rosselló Nevares.

El Gobernador recalcó que, desde el punto de vista de los proveedores de servicio la reforma propuesta se rige por las alianzas y el alineamiento de intereses en pro del ciudadano, en el cual las aseguradoras, los grupos medicos, y los hospitales están integrados.

'Hay dos cosas que nos ayudan. Uno, la competencia, que eso los pone de tú a tú. Una de las preocupaciones es que tú cogías una región, por decirlo así, la secuestrabas. Dos, son estas alianzas. Es un esfuerzo colaborativo y si alguien trata de tomar control sobre otro, el sistema no le va a funcionar a ese grupo que se está aprovechando', afirmó el Primer Ejecutivo.

Amparándose en la competitividad, la Administración de Rosselló Nevares dio paso a la reforma laboral, mientras que otros mandatarios, como su padre Pedro Rosselló González, aprobaron la privatización de la telefónica, y las autopistas --bajo Luis Fortuño Burset--, como manera de allegar capital, potenciar los servicios, pagar deudas o fomentar la 'colaboración' del Gobierno con el sector privado.

El nuevo modelo entrará en vigor el 1 de octubre del año en curso. El Departamento de Salud y ASES se proponen comenzar una campaña de orientación a los ciudadanos que dependerá de la fase de implementación en que se encuentre el proceso.

Las exigencias monetarias

La reforma al sistema de Salud de la Isla no solo estaba delineada en el Plan para Puerto Rico, plataforma base de la campaña de Rosselló Nevares rumbo a la gobernación, sino que forma parte del Plan Fiscal con proyecciones de los próximos cinco años.

En terminos de ahorros, el Gobierno vislumbra unos $750,000 millones de cara al 2022 e 'incorporará datos actuariales con datos demográficos actualizados, medidas de control de gastos y gestión de datos para reducir la presión sobre el sistema', según el documento entregado a la Junta de Control Fiscal (JCF).

Con estas medidas y la transición al nuevo sistema, esperan disminuir el costo de la prima por miembro por mes de la cantidad actual de $166 a $144. La cubierta, además, será modificada, no obstante, la Directora de ASES no especificó de que manera o si se verá una rebaja en los pagos a proveedores de salud.

El Plan Fiscal, y por consiguiente esta propuesta, se encuentra bajo revisión de la JCF. El Gobernador espera que los cambios sean acogidos porque el mismo modelo se había presentado en el plan fiscal entregado hace un año, y el ente federal lo avaló.

Cabe destacar que ese texto se basaba en el transcurso de diez años y no contemplaba desastres naturales como lo fueron los huracanes Irma y María.

Precisamente por los fenómenos atmosfericos Mi Salud ha experimentado una reducción de 31,000 participantes, de acuerdo a Rosselló Nevares. Mientras, unas 16,000 han entrado al sistema, desde el 20 septiembre, por lo que los datos son preliminares.

Por otra parte, el Gobierno aguarda la aprobación de un paquete de ayuda federal que sería utilizado para ayudar a las poblaciones más vulnerables y la retención de medicos.