Hoy el caucus del PPD se reúne antes de la sesión para discutir acciones tras el veto del Ejecutivo, pero existe malestar por el manejo de las enmiendas al Código Electoral.

La decisión del gobernador Pedro Pierluisi Urrutia de vetar un proyecto que restituiría poderes a la Legislatura para asignar fondos para sus propuestas “tendrá causa y efecto”, advirtió el presidente de la Cámara de Representantes, Rafael “Tatito” Hernández Montañez.

Pero detrás de ese grito de guerra se esconden las fisuras del liderato del Presidente Cameral, que hoy celebrará un caucus de la delegación del Partido Popular Democrático (PPD) ante miradas de desconfianza y de escepticismo por la estrategia adoptada para alcanzar los objetivos de la colectividad.

“Esto no se acaba aquí. La forma correcta era legislar para subsanar la falla”, afirmó a NotiCel.

“El tono se va a elevar y esto va a continuar”, agregó.

Ayer, el Gobernador rechazó el Proyecto de la Cámara 500 que buscaba “vindicar y restablecer las prerrogativas constitucionales de la Asamblea Legislativa de confeccionar y aprobar el Presupuesto General, diseñar el esquema de departamentos ejecutivos, así como revertir cualquier claudicación de su deber constitucional de velar por la sana administración del sistema democrático de gobierno”.

Según el Primer Ejecutivo, la medida “infringiría las disposiciones de la Ley PROMESA”.

La facultad de la Legislatura para intervenir en el presupuesto y reasignar fondos quedó limitada el cuatrienio pasada tras la aprobación de las Leyes 2 y 3 que atienden al emergencia fiscal del gobierno; así como la aprobación de la Ley federal Promesa.

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“El Gobernador de Puerto Rico es un tirano”, afirmó Hernández Montañez sobre las facultades del Primer Ejecutivo para asignar fondos y utilizar dineros sobrantes de la Legislatura sin que ese cuerpo puede intervenir en el proceso.

“Todo está sobre la mesa. Vamos a empezar de cero. El legislador va a ponderar mañana (hoy) cuan importante es esto”, agregó.

No es tan sencillo.

Existe una desconfianza mutua entre el líder cameral y algunos de sus compañeros y compañeras de partido por la fisura que causó la pugna por la Presidencia de la Cámara Baja. Pero también existe incomodidad por el estilo de gobernanza de Hernández Montañez, según varias fuentes legislativas.

Esa molestia quedó evidenciada el viernes pasado en la sesión de consideración final o “mark-up” de las enmiendas al Código Electoral, que debía bajarse a votación en la sesión de hoy pero su consideración quedó sin fecha debido a diferencias con los legisladores y legisladoras de la delegación roja.

Una fuente legislativa indicó a NotiCel que existe “preocupación” entre 8 a 10 legisladores, incluyendo a miembros del “Team Tatito” como José Rivera Madera y Ángel Fourquet Cordero, porque el proyecto para enmendar el Código Electoral no cumple con la promesa electoral del PPD de derogar la polémica ley electoral. La medida tampoco se trabajó en consenso con las otras delegaciones del Partido Independentista Puertorriqueño, Movimiento Victoria Ciudadana y Proyecto Dignidad, quienes se han expresado en contra del proyecto.

No solo no cuenta con todos los votos de la delegación popular, dos fuentes señalaron que el Senado -controlado por el PPD, trabaja su propia versión y su presidente, Jose Luis Dalmau Santiago, se encuentra fuera del país en el momento en que se suponía que la polémica medida bajaría a votación en la Cámara.

Con estos vientos soplando y la crisis tras bambalinas, Hernández Montañez podría tratar de vender el discurso de guerra durante el caucus de hoy puesto que, según fuentes de este medio digital, “hay terreno fértil para eso” entre la nueva cepa de legisladores.

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De ese caucus, saldrá el calendario de la sesión de hoy y podría determinarse el futuro de los dos nombramientos ante la consideración del cuerpo.

La delegación del PPD amarró la confirmación del designado secretario de Estado, Larry Seilhamer Rodríguez, a la aprobación del Código Electoral, que ahora se encuentra en el aire. El Senado ya extendió su consejo y consentimiento a esta designación.

Pese a que Seilhammer Rodríguez contaba con los votos para pasar el cedazo de la Cámara, el nombramiento ha ido perdiendo impulso por su apoyo al contrato de LUMA Energy. Este operador privado asumirá la administración de la red eléctrica y de las operaciones de la Autoridad de Energía Eléctrica a partir del 1 de junio. El contrato a 15 años por $1,500 millones sin que el consorcio invierta un centavo provocó que la Cámara y el Senado aprobaran una medida para aplazar el trámite hasta inicios del próximo año e insertar enmiendas al acuerdo pactado y avalado por la Junta de Supervisión Fiscal.

La Cámara también mantiene en remojo el nombramiento de Manuel Torres Nieves al cargo de Contralor de Puerto Rico, cuya confirmación ató a la aprobación de la resolución que aplazaba el contrato de LUMA y que el Gobernador vetó a inicios de mes.

“El efecto se verá en el día a día de las operaciones entre la Asamblea Legislativa y el Ejecutivo”, insistió Hernández Montañez.

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Aseguró que la aprobación de esta medida no estaba atada a ninguna negociación, como indicaron algunos legisladores después del caucus celebrado en Utuado, pero insistió en que el Ejecutivo sabía que se trataba de un asunto prioritario para la delegación del PPD.

“Mañana (hoy) va a haber una expresión de la Asamblea Legislativa como resultado de esta acción del Ejecutivo”, concluyó.