“Esto es alta traición. Saben que el sistema actual es solvente y que lo único que lo amenaza es la dejadez del patrono, entiéndase la Junta de Gobierno, de pagar responsablemente las aportaciones patronales en ley que corresponden”, denunció Ramos.

La representante Lourdes Ramos cuestionó las intenciones de la Junta de Gobierno de la Universidad de Puerto Rico, que insiste bajo presión de la Junta de Supervisión Fiscal (JSF), de eliminar los derechos adquiridos de los empleados del sistema universitario para transformar su Sistema de Retiro.

Historia relacionada: Deuda actuarial Retiro UPR superó los $1,700 millones

“Esto es alta traición. Saben que el sistema actual es solvente y que lo único que lo amenaza es la dejadez del patrono, entiéndase la Junta de Gobierno, de pagar responsablemente las aportaciones patronales en ley que corresponden”, denunció Ramos.

La legisladora novoprogresista, autora de la mayoría de las iniciativas legislativas y leyes que protegen a los jubilados del gobierno en sus diferentes Ramas, dijo que tal acción es ultra vires ya que es la Junta de Retiro del Sistema universitario y no la Junta de Gobierno, la que tiene la autoridad en ley para decidir el futuro del mismo.

“La ley que crea el Fideicomiso y que ya pasó el cedazo de los tribunales, le reconoce total autoridad a la Junta de Retiro. Están empeñados en destruir un sistema que opera bien y que responde a las necesidades de los empleados de la UPR. Es una infamia”, afirmó.

Ramos es parte de un grupo de Legisladores de todas las delegaciones políticas en la Cámara de Representantes - los representantes Denis Márquez Lebrón, Domingo Torres, Lourdes Ramos, Mariana Nogales y Lisie Burgos-, que reafirmaron, mediante la radicación de la Resolución Concurrente 73, su oposición a cambiar el actual Sistema de Retiro de la Universidad de Puerto Rico (UPR) por un Plan de Contribución Definida.

“He venido denunciando esta situación por largos meses y se lo he dicho de frente en la cara a los miembros de la Junta de Gobierno de la Universidad. Cerrar el Sistema de Beneficios Definidos, que mantiene un óptimo estado financiero, por razón de que la universidad reciba $20 millones retenidos por la JSF, es imitar a Judas y vender la universidad por varias monedas de plata”, acusó Ramos con visible enfado.

Enfatizó la líder estadista que el Fideicomiso del Sistema de Retiro-UPR cuenta con un patrimonio aproximado de $1.8 billones para enfrentar el pago de pensiones a futuro y cualquier deuda, corresponde a la disminución en aportaciones que le ha hecho la Junta de Gobierno.

“Están actuando en claro reto a la ley y atropellando las facultades únicamente reconocidas a la Junta de Retiro de la UPR, fiduciaria oficial del Fideicomiso. ¿Y así pretenden defender la principal institución educativa del país y el futuro de los empleados que han garantizado su permanencia?”, estableció Lourdes Ramos.