'Apoyo al de aquí': Botan a comerciantes boricuas del Aeropuerto para darle monopolio a extranjeras
La empresa Aerostar Airport Holdings ha botado a la calle a más de diez comerciantes puertorriqueños, que durante casi diez años mantuvieron sus concesionarios de comida en el Aeropuerto Internacional Luis Muñoz Marín (AILMM). Los propios comerciantes, entrevistados por NotiCel, han asegurado que la movida es un intento de monopolización de tres compañías extranjeras que persiguen adueñarse de todas las tiendas en el aeropuerto.
Potato Deli, Piccolo Gelatos, Pizza Box, Leather Ranch, Stop - N- Go, Patchy Sweets, Island Ice, El Morro Souvenir, McDonald's, Wendy's y Tropical Delight, son sólo algunos de los concesionarios que han tenido que cerrar sus puertas ante la negativa de Aerostar de renovarles los contratos.
La pérdida de empleos suma más de 50 personas, con 5 a 9 empleados por cada tienda. La lista continuará en aumento, aseguraron los propietarios, debido a un interés de la empresa en otorgarle todos los concesionarios de restaurantes de comida rápida a International Meal Corporation (IMC). El supuesto plan también consiste en dejarle las tiendas de licor y cigarrillos a Duffys, y de quedarse ellos con las tiendas de conveniencia.
El principal ejecutivo deAerostar, AgustínArellano, ya había informado de este acuerdo a la prensa. 'Esta compañía desarrolla la oferta de bebidas y comida en el aeropuerto. Trabajamos en conjunto, pero con responsabilidades compartidas', mencionó sobreIMC. Con esta movida, sin embargo,Aerostarolvidó la petición que le hizo el gobernador Alejandro García Padilla para que le garantizara la permanencia de los 22 concesionarios que operan sus negocios en el AILMM. 'El compromiso deAerostarcon esta servidora fue ayudar a los comerciantes del aeropuerto y nos aseguró que no iban a perder sus negocios porque su mejor interés era desarrollarlos', sostuvo, por su parte, la presidenta del Centro Unido de Detallistas,EnidMongedePastrana, ante el desalojo del primer comerciante el pasado 2 de abril.
'Ellos nunca nos dieron una oportunidad de sentarnos a la mesa', comentó Richard Báez, propietario de dos tiendas de helados italianos. Al empresario le llegó una carta, 30 días antes de que le venciera el contrato, donde se le indicaba que tenía que recoger sus cosas y salir. La inversión que hizo de $350,000 para la apertura de una segunda tienda en el nuevo terminal de Jet Blue, hace un año, quedó en la nada. 'No creo que pudimos recuperar ese dinero', se lamentó. Tanto él como su esposa, que también administraba el negocio, quedaron desempleados.
Uno que dice que no cobra un centavo desde hace un mes es el propietario de las carretas de dulces, Nervic Velez Carrión. 'Nunca en los diez años que llevó en el aeropuerto pagué tarde. Aquí no hubo voluntad de negociar. Ellos tenían un plan de antemano', criticó el hombre, de 39 años, quien cuestionó las expresiones que hiciera el ejecutivo de Aerostar, Agustín Arellano, de que los concesionarios no pagaban y no estaban dispuestos a remodelar. 'Eso es falso. Sometí planes para remodelar y no les hicieron caso', aseguró.
Otro propietario optó por vender el negocio a IMC para que sus empleados no tuvieran que ir a la calle. El hombre, de 43 años, prefirió mantener el anonimato debido a estrictas exigencias de confidencialidad de la cadena brasileña. 'Nos dicen que el aeropuerto no está a tono con el siglo XXI y que nos van a quitar para traer otros concesionarios que, en realidad, nadie conoce'.
El objetivo de IMC, según lo exponen en su portal web, es ser la empresa más grande de servicios de alimentos en América Latina. La cadena genera gran parte de sus ingresos por sus operaciones en los aeropuertos de República Dominicana, Panamá, Colombia, México y Puerto Rico.
Los comerciantes aseguran que la cadena ya era dueña del 60% de las tiendas en el AILMM . 'Lo triste de la ecuación es que son tres compañías extranjeras que no invierten un centavo en el país. El 70% de sus productos los traen en vagones de afuera, no lo compran aquí'. 'El aeropuerto se va a quedar sin capital puertorriqueño', enfatizó el hombre que no quiso ser identificado.
El resultado de la movida no sólo deja a varios comerciantes sin su sustento o al menos, sin una importante fracción de sus ingresos, sino que también representa una carga económica mayor para el consumidor debido al aumento en el costo de los productos. 'Cuando yo tenía el agua a $2, ellos la van a tener a $3.50',comparó Báez Figueroa, quien se mostró decepcionado con la decisión del gobierno.
Velez Carrión , incluso, tuvo la oportunidad de reunirse con el gobernador cuando éste inauguró la línea aérea Avianca. 'Le dije: Alejandro, me fallaste. Me acaban de despedir del aeropuerto'. Para su sorpresa, el gobernador regresó más tarde a conversar con él y le dijo que lo iba ayudar, pero esa fue la última vez que supo de él. 'Destruí mis carretas y me fui', lamentó.
Cartas_a_Pachys_Sweets_(Aerostar).pdf_4130