Tetrad Enterprises defiende su gestión ante decisión de DRNA
La compañía que manejaba los sistemas de bombas de agua en San Juan, Cataño, Guaynabo y Salinas está dispuesta a iniciar una transición ordenada.
Luis Hernández, director de Tetrad Enterprises, aseguró que la cancelación del contrato para manejar los sistemas de bombas de agua en San Juan, Cataño, Guaynabo y Salinas fue una "sorpresa".
El funcionario, por otro lado, señaló que está dispuesto a iniciar una transición ordenada si el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) se mantiene firme en la decisión de cancelar el contrato para los servicios que ofrecía en las estaciones localizadas en San Juan, Cataño, Guaynabo y Salinas.
"Siempre hemos ayudado a las comunidades. Somos una compañía puertorriqueña, pensamos con el corazón y no en el bolsillo", dijo Hernández.
"Si no nos quieren, estamos dispuestos a una transición como manda la ley de contratos en Puerto Rico. Siempre cooperaremos porque no peleamos por un contrato, sino por la gente que necesita. Estamos dispuestos siempre a hablar con transparencia", afirmó.
Roberto Méndez Martínez, secretario interino del DRNA, reclamó que Tetrad Enterprises incumplió con las ejecuciones de varios compromisos contractuales. Dicha decisión deja a las estaciones sin el personal adecuado para activar las bombas debido a copiosas lluvias en los pueblos mencionados.
"Nos entregaron una carta el viernes en la tarde y están copiados funcionarios de La Fortaleza. Los alcaldes nos preguntan, han dado declaraciones que les sorprende y a nosotros también. Si hay unas deficiencias, que las digan. Para mí no hay, pero para ellos (DRNA) las hay y las aclaramos. Estamos dispuestos a ayudar hasta el que venga porque la gente se lo merece. No peleando por un contrato, peleamos por vida y propiedad", sostuvo Hernández.
Miguel Romero Lugo, Karilyn Bonilla Colón, Edward O’Neill Rosa y Julio Alicea Vasallo, alcaldes de San Juan, Salinas, Guaynabo y Cataño, respectivamente, públicamente han levantado la voz de alerta ante los potenciales consecuencias por le determinación del DRNA.
"Si nos dicen que prendamos las bombas, lo hacemos con la debida autorización de Recursos Naturales. En una emergencia, aunque no tengamos contrato, con la debida autorización lo haremos porque una vida vale más que $1,000 millones. Tenemos el personal y el equipo necesario para mantener las bombas corriendo. No es solamente mover un receptáculo. Ojalá fuera así de fácil y que puedan hacerlo porque les deseamos lo mejor", cerró Hernández.