El alcalde de Cabo Rojo, que desde hoy regresa su municipio a la segunda fase, llamó al gobierno a hacer lo mismo porque la reapertura "no ha funcionado".

Las cifras récord de hospitalizaciones y nuevos casos de COVID-19 durante los pasados días fueron suficientes para que el alcalde de Cabo Rojo, Roberto "Bobby" Ramírez Kurtz, decidiera regresar a la etapa 2 de reapertura en su municipio y ordenara que el toque de queda volviera a ser a las 7:00 p.m.

Entre sus medidas se encuentra el cierre de las concurridas playas de su municipio, barras, y establecimientos no esenciales; tal como corría todo antes de la emisión de la última Orden Ejecutiva el pasado mes de junio.

"Dijimos que si teníamos que regresar (a la etapa 2) porque no funcionaba, regresábamos", dijo a NotiCel tras mencionar que, además, la reapertura del turismo internacional, que comienza hoy, y la escasez de reactivos son razones adicionales tras de su decisión.

"Eso nos va a complicar la cosa. Tenemos que tomar medidas en este momento porque la gente se fue en descontrol", expresó. "Tenemos que poner orden para salvar vidas. Aquí yo lo que busco es salvar vidas. Yo no quiero vivir un María nuevamente".

Hasta ayer, según informó, en su municipio sumaban 110 casos positivos a COVID-19.

"Ya en Cabo Rojo cerró la Cooperativa de Ahorro y Crédito, cerró McDonald's. El Departamento de Salud Ambiental, que cubre Las Marías, Maricao, Cabo Rojo, Mayaguez, Añasco y Rincón, y el Cuerpo de Vigilantes tiene las oficinas cerradas desde Aguadilla hasta Ponce con casos positivos", detalló.

El toque de queda municipal comienza hoy, 15 de julio, y se extenderá hasta el 26 de julio.

Ramirez Krutz explicó ayer que durante el horario de toque de queda, podrá transitar todo ciudadano cuyo trabajo lo requiera bajo autorización patronal.

En cuanto a los comercios, desde el 15 de julio al 26 de julio, operarán dentro del período de toque de queda decretado.

Además, todo comercio permanecerá cerrado los domingos, con excepción de gasolineras, farmacias y panaderías.

La autorización patronal aplicará a personas identificadas en agencias de seguridad pública o privada, a nivel estatal, federal y municipal; profesionales de la salud y personal que labora en hospitales, farmacias, farmacéuticas, instalaciones de biociencia o centros de salud.

También quedan exentos personal que se encuentre trabajando en la cadena de distribución al por mayor y manufactura de bienes y alimentos; aquellos ciudadanos que estén atendiendo situaciones de emergencias o de salud; y ciudadanos que salgan a recoger o comprar alimentos mediante carry-out o servicarro en los comercios de ventas de alimentos y supermercados.

Asimismo, todas las barras, playas y rampas de botes localizadas en los términos jurisdiccionales de Cabo Rojo quedarán cerradas al público hasta que culmine la orden.

El alcalde Ramírez Kurtz recordó mantener el uso de mascarilla, bufanda de tela u otro material y mantener una distancia de 6 pies entre las demás personas.

Aparte de sus medidas, Ramírez Kurtz aseguró que el proceso de rastreo en su municipio ha sido exitoso.

"De los casos que salieron de domingo para lunes, para darte una idea, de los 15 casos que llegaron, ya nosotros 13 de ellos los teníamos en el sistema del municipio, antes que el Departamento de Salud", explicó.

En caso de que los ciudadanos tengan dudas sobre contagios, el alcalde informó que pueden comunicarse al 787-851-1025, extensión 2273.

Ramírez hizo un llamado al gobierno central para "salvar vidas".

"Es momento de regresar a la etapa 2, porque la 3 no ha funcionado. Ese es el llamado que hacemos", concluyó.