De esta encuesta, dependerá la asignación de fondos para servicios públicos esenciales y el proceso de distribución electoral.

Hacer un conteo certero de la ciudadanía en medio de un país paralizado a causa del coronavirus representa un enorme reto para los trabajadores del Censo 2020.

Pero a pesar del desafío, la agencia mantiene la meta de entregar los resultados de la encuesta al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y al Congreso en diciembre próximo, como lo requiere la ley.

“Empezábamos en marzo 15 con el proceso y se anunció el distanciamiento social, así que decidimos cumplir con la petición de la gobernadora. Creemos en que la seguridad de las personas es más importante, así que paramos la operación”, explicó a NotiCel María Olmedo Malagón, directora de comunicaciones del Censo.

La Constitución de los Estados Unidos exige que se realice un censo de la población cada 10 años. Las estadísticas de la población de la Oficina del Censo determinan cómo miles de millones de dólares en fondos federales se asignarán para lograr la permanencia de servicios públicos esenciales como educación, servicios de salud, respuesta a emergencias, carreteras y puentes.

No solo se trata de fondos para programas esenciales. Estos datos también definirán los contornos de los precintos y unidades electorales en la Isla.

Pese a que algunos desconfían del uso que el gobierno podría dar sus datos, a juicio de Eduardo Bhatia, exdirector de la Administración de Asuntos Federales de Puerto Rico (PRFAA), contar a la gente constituye un ejercicio esencial en el proceso para elaborar política pública y un elemento indispensable en una democracia.

“Si tú sabes qué edad y cuánta gente vive, en cada barrio y en cada pueblo, puedes planificar para ahora y para el futuro. De esa información, se desprende cuántos hospitales necesitas, cuántas escuelas, cuántos policías y en qué sitios, maestros… es la herramienta más importante para decidir la cosas que el gobierno hace”, señaló Bhatia.

“Al momento de repartir fondos, obviamente, a Río Grande le toca más dinero que a Ceiba porque tiene mucha más gente. Pero eso, como único lo podemos saber, es por el Censo. Así que el Censo no es una prioridad, es responsabilidad que tenemos cada 10 años para poner al día las cifras que nos dan un mapa bien claro, un rayos X, de dónde está la población," afirmó.

"Si está naciendo gente, si no lo está, todo eso es fundamental. Con el número del Censo se determinan las líneas de los distritos representativos y senatoriales, y la representación en la democracia depende de cuánta gente haya, y cada distrito tiene que tener la misma cantidad de población. Es por eso que hoy el distrito de San Juan ya incluye a Aguas Buenas y Guaynabo, porque San Juan ha perdido su población. Es la manera de hacer redistribución electoral, que es la herramienta que se usa para las elecciones”, añadió.

Al momento, solo el 4.1 por ciento de la población en la isla ha contestado al Censo 2020, una respuesta que podría responder al desplazamiento y la migración de puertorriqueños después del huracán María. Por ello, el Censo amplió su plan de visitas para validar direcciones en su listado.

Olmedo Malagón también se expresó sobre las dificultades de enviar personal directamente a las comunidades, pero afirmó que es una de las maneras más precisas para asegurar que todo el mundo complete el proceso.

“Enviar trabajadores del Censo es un proceso bien costoso, lo que buscamos es que la gente conteste desde sus casas y así uno evita ser entrevistado en persona, que es algo que a veces incomoda. Muchas veces, las personas reciben su paquete del Censo y lo dejan en la mesa. De todas formas te van a ir a visitar y muchos prefieren terminar haciéndolo con el código que se les envió y que pudieron haber hecho desde un principio”, indicó.

Ese proceso, sin embargo, quedó pausa durante la pandemia porque la Oficina del Censo suspendió la entrega en persona de la encuesta en los hogares desde mediados de marzo.

Ante esta situación, el Censo ha convocado a los ciudadanos a completar el formulario por internet.

En respuesta a los reparos que tienen algunas personas a completar la encuesta, Olmedo Malagón reiteró que la información es totalmente confidencial y nunca se solicita seguro social, número de tarjeta de crédito o estatus migratorio.

La fecha límite para completar el censo era el 31 de julio, pero, a raíz de la emergencia de COVID-19, se extendió hasta el 14 de agosto. Pero el 31 de diciembre se mantuvo como la fecha final para la entrega de resultados.

En Puerto Rico, el tema de censo pasa casi inadvertido, pero en Estados Unidos investigadores del Urban Institute alertaron de que el desplazamiento de ciudadanos como medida de prevención ante el coronavirus podría afectar los resultados del censo, que ayudarán determinar cuántos escaños en el Congreso y votos del Colegio Electoral obtiene cada estado, en un país cada vez más polarizado por el estilo de gobernar del presidente Donald Trump.

Debido a esta preocupación, el centro de investigación y laboratorio de ideas pidió que la Oficina del Censo extienda el proceso de recopilación de datos. Solicitó también que el Congreso posponga la fecha límite del 31 de diciembre.

No cambiaría el número, sino la población

Bhatia pronosticó que, una vez se culminen los trabajos de conteos, la población en Puerto Rico, más allá de haber reducido a causa de María, debe haber cambiado de perfil.

“Creo que la diferencia en Puerto Rico no va a ser del número de población, sino de la edad de la población, porque se fue mucha gente joven y regresó a Puerto Rico mucha gente vieja. Si es así, como anticipo que va a ser, el próximo gobernador tiene que enfocar la política pública hacia los viejos. Eso significa que tiene que tener más servicios médicos, más amas de llaves… hay que dirigirse hacia esas necesidades”, destacó.

“Lo peor que le puede pasar a un pueblo y barrio es que se cuente de menos. El censo esta hecho científicamente con la dirección de cada persona en Puerto Rico y lo que se esta tratando de lograr que que la mayor parte de personas lo lleven por internet. Yo me senté con mi papá y se lo llené a él. Así que todo el que sea mayor que no domine la computadora, que busque a alguien que lo ayude y hasta en el mismo teléfono se puede hacer y no debe tomar más de 10 minutos”, precisó.

Para acceder puede ingresar a www.2020census.gov/es o llamar al 844-426-2020.