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Parroquia Stella Maris adoptó un estricto protocolo ante la pandemia
Publicado: Aug 30, 2020 10:30 PM
Los feligreses que quieren ir a misa deben reservar su espacio por teléfono o a través de la plataforma "Eventbrite".
Ante la emergencia que vive la isla por el COVID-19, la Parroquía Stella Maris creo un protocolo para permitir la entrada de feligreses.
Antes de entrar hay que desinfectarse las manos con alcohol.
Están prohibidas las mascarilla de tela. Es obligatorio usar mascarillas quirúrgicas o N95.
A los feligreses se les toma la temperatura y luego se busca el nombre en la lista de registro.
En el piso, hay marcas para mantener los 6 pies de distanciamiento físico.
Solo se permite el 20% de capacidad del templo.
Las bancas que no se pueden utilizar están separadas con una cinta blanca.
Los feligreses entran por una puerta y salen por otra.
El párroco José Vázquez Colón "Padre Tito" ofrece la misa dominical.
La misa también es transmitida en vivo por las plataformas sociales y el canal de la iglesia en YouTube.
Según Padre Tito, como le dicen cariñosamente al párroco, la iglesia ha ganado feligreses virtuales.
Unas 2,000 personas se conectan o ven la misa de forma diferida a través de las redes sociales de la iglesia.
Los feligreses tienen que llevar mascarilla todo el tiempo.
El Párroco José Vázquez Colón "Padre Tito" ofrece la misa dominical.
Ya no se hace fila. Ahora el Padre Tito entrega la hostia a los feligreses.
El sacrista Juan García asiste en la entrega de la hostia a los presentes.
A la finalizar, sale el párroco primero.
Luego del párroco, salen los feligreses por dos puertas laterales con 6 pies de distanciamiento.
Voluntarios de la Parroquia Stella Maris desinfectan la iglesia tan pronto acaba la misa.
Como parte del protocolo de limpieza, los filtros de los aires acondicionados se cambian una vez a a semana.
Ante la emergencia que vive la isla por el COVID-19, la Parroquía Stella Maris creo un protocolo para permitir la entrada de feligreses.
Antes de entrar hay que desinfectarse las manos con alcohol.
Están prohibidas las mascarilla de tela. Es obligatorio usar mascarillas quirúrgicas o N95.
A los feligreses se les toma la temperatura y luego se busca el nombre en la lista de registro.
En el piso, hay marcas para mantener los 6 pies de distanciamiento físico.
Solo se permite el 20% de capacidad del templo.
Las bancas que no se pueden utilizar están separadas con una cinta blanca.
Los feligreses entran por una puerta y salen por otra.
El párroco José Vázquez Colón "Padre Tito" ofrece la misa dominical.
La misa también es transmitida en vivo por las plataformas sociales y el canal de la iglesia en YouTube.
Según Padre Tito, como le dicen cariñosamente al párroco, la iglesia ha ganado feligreses virtuales.
Unas 2,000 personas se conectan o ven la misa de forma diferida a través de las redes sociales de la iglesia.
Los feligreses tienen que llevar mascarilla todo el tiempo.
El Párroco José Vázquez Colón "Padre Tito" ofrece la misa dominical.
Ya no se hace fila. Ahora el Padre Tito entrega la hostia a los feligreses.
El sacrista Juan García asiste en la entrega de la hostia a los presentes.
A la finalizar, sale el párroco primero.
Luego del párroco, salen los feligreses por dos puertas laterales con 6 pies de distanciamiento.
Voluntarios de la Parroquia Stella Maris desinfectan la iglesia tan pronto acaba la misa.
Como parte del protocolo de limpieza, los filtros de los aires acondicionados se cambian una vez a a semana.
Ante la emergencia que vive la isla por el COVID-19, la Parroquía Stella Maris creo un protocolo para permitir la entrada de feligreses.
Antes de entrar hay que desinfectarse las manos con alcohol.
Están prohibidas las mascarilla de tela. Es obligatorio usar mascarillas quirúrgicas o N95.
A los feligreses se les toma la temperatura y luego se busca el nombre en la lista de registro.
En el piso, hay marcas para mantener los 6 pies de distanciamiento físico.
Solo se permite el 20% de capacidad del templo.
Las bancas que no se pueden utilizar están separadas con una cinta blanca.
Los feligreses entran por una puerta y salen por otra.
El párroco José Vázquez Colón "Padre Tito" ofrece la misa dominical.
La misa también es transmitida en vivo por las plataformas sociales y el canal de la iglesia en YouTube.
Según Padre Tito, como le dicen cariñosamente al párroco, la iglesia ha ganado feligreses virtuales.
Unas 2,000 personas se conectan o ven la misa de forma diferida a través de las redes sociales de la iglesia.
Los feligreses tienen que llevar mascarilla todo el tiempo.
El Párroco José Vázquez Colón "Padre Tito" ofrece la misa dominical.
Ya no se hace fila. Ahora el Padre Tito entrega la hostia a los feligreses.
El sacrista Juan García asiste en la entrega de la hostia a los presentes.
A la finalizar, sale el párroco primero.
Luego del párroco, salen los feligreses por dos puertas laterales con 6 pies de distanciamiento.
Voluntarios de la Parroquia Stella Maris desinfectan la iglesia tan pronto acaba la misa.
Como parte del protocolo de limpieza, los filtros de los aires acondicionados se cambian una vez a a semana.
La Parroquia Stella Maris en Condado estableció un estricto protocolo de seguridad para ofrecer la misa los domingos y mantener seguros a sus feligreses debido al COVID-19.
Fotoperiodista independiente, su trabajo se centra en documentar protestas, la política y los desastres naturales que ocurren en el país. Las mujeres, las luchas sociales y la desigualdad son su mayor preocupación. Sus fotos han sido publicadas en medios locales tanto impresos como digitales. También ha colaborado con agencias de noticias internacionales.