Congreso pelea otra vez por evitar un cierre administrativo
Necesitan aprobar un presupuesto antes del viernes a medianoche; no descartan votar para extender el plazo una semana más.
El Congreso estadounidense negocia de nuevo estos días a contrarreloj la aprobación de un presupuesto para evitar el cierre temporal de la Administración, que tendría lugar este viernes a medianoche si no llegan antes a un acuerdo.
La Cámara de Representantes prevé votar este miércoles una resolución de continuidad para extender ese plazo una semana más, hasta el 23 de diciembre, y dar así más tiempo a la negociación del proyecto de ley, conocido como ómnibus, que financie el año fiscal 2023, que va desde el 1 de octubre de 2022 al 30 de septiembre del año siguiente.
La anterior resolución de continuidad fue aprobada el 30 de septiembre y permitió financiar al Ejecutivo bajo los mismos parámetros que ahora hasta este viernes, fecha en la que se deberá haber llegado a otro acuerdo para impedir que la Administración se paralice.
Después de su paso por la Cámara de Representantes, la nueva partida de gastos temporal deberá ser sometida a voto en el Senado.
"Antes de aprobar un proyecto de ley debemos asegurarnos que el Gobierno no se paraliza, así que vamos a tener que aprobar esa resolución lo antes posible", señaló hoy el líder de la mayoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer.
Desde 1976, cuando se aprobaron nuevas leyes presupuestarias, la Administración estadounidense se ha quedado sin fondos en 20 ocasiones, aunque la mayoría de veces ha sido solo durante un día. El cierre más largo, de 35 días, ocurrió durante la Presidencia del republicano Donald Trump (2017-2021).
Algunos legisladores republicanos han afirmado ya que prefieren seguir posponiendo el debate sobre el nuevo proyecto de ley hasta el próximo año, cuando su grupo recupere en enero el control de la Cámara de Representantes, con la esperanza de que esto les dé mayor poder de negociación para forzar recortes.
"No podemos seguir gastando de la forma en la que los demócratas lo hacen. La solución no está en gastar más dinero, sino en eliminar lo innecesario y en dar prioridad a lo que la población estadounidense quiere", señaló hoy en conferencia de prensa el actual líder de la minoría republicana en la Cámara Baja y principal candidato para asumir su presidencia en enero, Kevin McCarthy.
Este martes por la noche el senador demócrata que controla el proceso de asignación de presupuestos, Patrick Leahy, señaló que se había alcanzado un acuerdo bipartidista sobre un marco de trabajo con el que seguir avanzando en la elaboración de la nueva partida de gastos anual.
El anuncio no facilitó detalles sobre su contenido y desde el bando republicano algunos de sus principales representantes han dejado claro ya que se opondrán cuando sea sometida a voto, previsiblemente la próxima semana.
Entre ellos, el congresista Mike Turner: "Animo a otros a bloquearlo también porque falla a la hora de proteger nuestra seguridad nacional", apuntó en una rueda de prensa en la que su colega Elise Stefanik, "número tres" del partido en la Cámara Baja, criticó que los demócratas planeen gastar billones en la implementación de su "agenda radical".