Acuerdo del Senado para suspender el tope de la deuda es solo un respiro
En diciembre deberán buscar una nueva salida para evitar la insolvencia y la inestabilidad de los mercados financieros.
El Senado de Estados Unidos oficialmente aprobó este jueves suspender el tope de la deuda hasta diciembre para evitar así que el país incurra en una suspensión de pagos de su deuda nacional a partir del 18 de octubre.
Los demócratas aprobaron únicamente con sus votos —50 a 48— la suspensión del tope de endeudamiento después de que la oposición republicana se negara a colaborar con el Ejecutivo de Joe Biden, poniendo así en riesgo la solvencia de EE.UU. y la estabilidad de los mercados financieros.
El proyecto pasa ahora a la Cámara Baja, cuya mayoría demócrata deberá aprobar antes de que finalice la próxima semana.
Sin embargo, el acuerdo es solo un parche: suspende el tope de endeudamiento hasta el 3 de diciembre, pero no ofrece una solución permanente, como querían los demócratas.
El acuerdo despertó una respuesta tibia en la Casa Blanca, que llevaba días insistiendo en que se necesitaba suspender el techo de deuda más a largo plazo y tendrá que conformarse ahora con una solución temporal.
El voto de este jueves en el Senado se produjo después de que el líder republicano en el Senado, Mitch McConnell, accediera horas antes a renunciar al mecanismo parlamentario que requiere una súper mayoría, permitiendo así que los demócratas aprobaran solos la medida.
La decisión de McConnell enfureció a una gran parte de los republicanos, que llevaban semanas tensando la cuerda con la economía estadounidense al borde del precipicio.
McConnell le presentó a los demócratas una "oferta que no podían rechazar", en el más puro espíritu de "El Padrino" y con el maquiavélico trasfondo que domina el Congreso desde hace años.
En concreto, McConnell dijo que estaba dispuesto a levantar el tope de endeudamiento durante dos meses, hasta diciembre, y avisó a los demócratas de que si rechazaban su propuesta se desataría el caos en los mercados y EE.UU. se encaminaría hacia una crisis económica sin precedentes.
Los demócratas no tuvieron otra opción que aceptar la oferta de McConnell. De no hacerlo, los republicanos habrían aprovechado para culparlos del desastre económico.
Además, no existía otra alternativa a la vista, ya que los republicanos llevan desde junio avisando que no votarán por una solución permanente y han pedido repetidamente a los demócratas que usen un mecanismo llamado "reconciliación" para aprobar en solitario la subida del techo de deuda.
Los demócratas se niegan a usar esa maniobra porque solo puede emplearse una vez por año fiscal y planean utilizarla para aprobar buena parte de la agenda económica del presidente estadounidense, Joe Biden.
Por otro lado, la secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, había alertado en varias ocasiones que la fecha del 18 de octubre podía ser la que Estados Unidos incurriera en una suspensión de pagos de la deuda nacional por primera vez en su historia.
Esa temida suspensión de pagos podría haber desatado la temida crisis en los mercados financieros y haber rebajado la nota de solvencia de Estados Unidos.
Esta situación sobre el tope de deuda se produce porque, a diferencia de otros países, en Estados Unidos el Gobierno solo puede emitir deuda hasta el límite establecido por el Congreso, que tiene el poder de elevar ese techo según crea conveniente.