Obama pide cerrar filas con Biden ante la invasión rusa de Ucrania
Aunque admitió que las sanciones pueden alterar el mercado energético y derivar en "consecuencias económicas" para Estados Unidos.
El expresidente de Estados Unidos Barack Obama (2009-2017) pidió este jueves a los estadounidenses cerrar filas en torno al actual mandatario, Joe Biden, ante la invasión rusa de Ucrania, y apoyó las sanciones contra Rusia a pesar de que puedan traer "consecuencias económicas".
"Todo el mundo tiene que condenar las acciones de Rusia y mostrar apoyo a Ucrania. Y cada estadounidense, independiente de su partido, debe apoyar los esfuerzos del presidente Biden, en coordinación con nuestros aliados, para imponer sanciones contundentes a Rusia", reivindicó el expresidente en un comunicado.
Obama admitió que las sanciones a instituciones financieras rusas pueden alterar el mercado energético y derivar en "consecuencias económicas" para Estados Unidos, pero defendió que ese es "el precio a pagar para defender la libertad".
"Tenemos que escoger entre un mundo en el que los autócratas imponen su voluntad por la fuerza o un mundo en el que la gente tiene el poder de decidir su futuro libremente", expresó Obama, quien era presidente cuando Rusia anexionó a Crimea en 2014.
El expresidente tachó el ataque lanzado esta madrugada por Rusia contra Ucrania de "invasión ilegal en el corazón de Europa", y una amenaza a la democracia, el estado de derecho y la libertad.
Además, mostró su apoyo a quienes sufran las consecuencias de "esta guerra sin sentido" y a los rusos que han protestado en las calles en contra de la invasión.
Después de meses de tensiones, Rusia ha lanzando en las últimas horas una operación militar en Ucrania con bombardeos en varios centros urbanos, lo que ha llevado al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, a declarar la ley marcial en todo el país y romper relaciones diplomáticas con Moscú.
Biden anunció este jueves sanciones contra cuatro grandes entidades financieras rusas, entre ellas VTB, el segundo mayor banco del país, así como nuevos castigos económicos a oligarcas cercanos al Kremlin.