Wandering
adjective
'Characterized by aimless, slow or pointless movement', 'To ramble without a definite purpose or objective; roam, rove or stray'
Nada como el lenguaje --y en este caso el idioma ingles-- mágico en ataduras y delaciones para significar características. 'Una movida que se caracteriza por la carencia de propósito o dirección, lento y sin sentido o uso'. 'Escribir de una forma inconsecuente sin un propósito u objeto definido, vagar, ir sin destino fijo o perderse'.
Así es el factor Wanda Vázquez Garced en el gobierno; en su recien adquirida gobernación sin elección y sin votos; y en su acabada de anunciar aspiración política. Así se cantó la Gobernadora inelecta en cuanto a la estadidad varias veces hasta hace muy poco. Así se comportó como Secretaria de Justicia igualando en su 'no ver, no enterarse, no saber' al antiguo secretario Pedro Pierluisi, en las artes del ocultismo fiscalizador y procesador de las denuncias de corrupción, es decir, perdida en el espacio.
Perderse ha sido casi su única estrategia, coger el monte y evadir hacer olas, zafarse de agarrar el toro por los cuernos, un 'a juyir' ha sido su consigna. Si es corrupción 'dejaselo a los federales', si hay un problema hay que escucharlo aunque no se sepa hacer nada, o no se vaya a hacer nada. Ir a todos los lugares, no perderse un baile de muñecas, hacer declaraciones inocuas a diestra y siniestra, y sonreír, como se pueda, que tarde o temprano mejorará y no saldrá tan ensayada.
Wanda Vázquez ha estado 'wandering', lo que no significa que haya transitado con el despropósito.
Jugando al espectáculo
Desde comienzos del cuatrienio, el Partido Nuevo Progresista (PNP) ha estado capeando un viejo temporal que no es María. Una primaria ruda, casi sanguinaria en el año 2016, resultó en la selección del candidato a la gobernación más hiper-inexperto de la historia. No sólo no estaba preparado para gobernar, pues a decir verdad, en muchos sentidos se trataba de su primer trabajo no paleado. Lo cierto es que había participado del mundo academico con más fortuna que quien gana el Powerball, obteniendo espacios que a otros toman largos años en un par de universidades. Cuando el merito no es principio, ni siquiera al final, están los Ricky de la vida. El PNP comenzó el cuatrienio rajado por la mitad, con el más malo de los candidatos electos del PNP con la menor cantidad de votos de su historia. Comenzó cargando ese pesado fardo y arrojando al desecho, al otro, al que se quedó 'dao' Pedro Pierluisi, quien deportivamente --porque tambien practica el deporte del oportunismo-- lo apoyó y endosó irresponsablemente aun cuando en la campaña lo tachó de inexperto, sin preparación y todo lo demás. Claro está, la recompensa vendría con el nombramiento de su hijo a la Secretaría del DACO. Recientemente se ratificó en su endoso oportunista a Ricky con un nuevo acto de oportunismo para congraciarse con los seguidores del gobernador en fuga.
El PNP quedó muy mal parado en la elección de Ricky Rosselló, pues las heridas cierran brevemente con la sutura de la expectativa de controlar el presupuesto. Pero salieron de la primaria 'rajaos por la mitad' y siguieron en la gobernación 'jendíos por el medio'. A este cuadro de horror seguirían las equivocaciones y disparates casi diarios de un gobernante, Ricky, que todo lo tenía apuntado en un 'Plan del Plan' sacado de las aguas y grupos de un movimiento, del cual acaso provino aquel primer chat integrado por un consorcio de inexpertos que sumaban 'el hambre con la miseria', y tambien con la abundancia del hambre de poder y la avaricia.
Eso sí, Ricky tenía un poderoso aparato publicitario fututeándose entre 8 y 9 millones de dólares al mes, más una cantidad de fondos en misas sueltas --debo decir cuentas sueltas-- y otras que todavía están colgando. Con ese concentrado aparato publicitario, intento crear o fortalecer una imagen, que era sólo eso, una imagen que se desmoronaba como los castillos de arena entre escándalos y renuncias; desplantes e investigaciones; el año onceno y duodecimo de recesión consecutiva para la economía del país; y la pugna con su endosada y adorada Junta, asunto del cual se quiso alejar.
Perderse ha sido casi su única estrategia.
Solo jugando a un gran espectáculo, con la morfina publicitaria de la imagen, el PNP se trataba de quitar el dolor profundo. Haber ganado la elección en la peor circunstancia, con el gobernador más ignorante imaginable, con su equipo todopoderoso inflado de soberbia --hay siempre alguna excepción-- obligaba a hacer más que nunca del gobierno un gran espectáculo.
Ese espectáculo colapsó el día que el gobierno ya colapsado, recolapsó con el huracán María. Durante los próximos tres o cuatro meses los puertorriqueños descubrimos que era cierto, que Puerto Rico o no tenía, o que apenas tenía gobierno. Nunca antes se vio en un mismo país semejante carencia de aparato de gobierno, igualada solo por la carencia de poderes que el colonialismo atosiga.
Lo demás fueron devaneos y más desaciertos, pugnas tipo 'don't push it', ofreciendole un puño en la boca a Trump y los grandes arrestos en el Departamento de Educación y en el Plan de Salud del gobierno. Una ensalada de otros escándalos --algunos legislativos o de funcionarios de gabinete-- y decenas de renuncias acumuladas fueron la antesala para el trágico circo de apetitos voraces.
El trágico circo de apetitos voraces
Siempre me han llamado la atención los enredadores profesionales. Esos personajes que los pillan en una mentira y disparan dos o tres más para salir del paso; o aquellos que los agarran en una trampa y evolucionan y resuelven con otra docena de tramoyas para salir del paso. Así, ha sido la administración Rosselló-Pierluisi-Vázquez-- van de un lío a otro, de una trampa a otra, con un solo propósito: salir del paso, no importa a cuántas personas tengan que tratar de coger de idiotas, sin importar cuánta intransparencia, desinformación, cuarto oscuro y chanchullo o semichanchullo haya que parir. Pero no es solo trabuluquear para salir del lío, es tambien para circular la divisa de faltarle el respeto a la inteligencia; y de maltratar y 'bulear' a quien sea.
Si hay que agigantar el regimen del favoritismo, si hay que violentar derechos civiles, si hay que satisfacer a buitres grandes y a pirañas medianas y pequeñas, de eso trata el gobierno: de un gran pulguero para dar rienda suelta a esos apetitos.
Los eventos de julio fueron una respuesta al abuso generalizado, a la conducta estrafalaria de un gobierno ausente, insensible, inepto y plagado de mafias y corruptelas: un trágico circo de apetitos voraces.
Los eventos de julio del 2019 --hace 5 meses, no diez años-- debieron producir no solo la fuga o huida de Ricky Rosselló, sino la de su línea sucesora. Por decoro, no por estrategia, toda la sucesión debió renunciar. Pues los que no estaban implicados en el segundo chat, lo estaban en la complacencia, en la negación de no querer ver, ni investigar, en el piloto automático del 'acomodo razonable' de parentelas y otros interese alejados del bien del Pueblo.
Solo un circo de apetitos voraces como ese, nos llevó a la maquinación estabilizadora y malsana de tener a dos secretarios de Justicia que no hicieron nada frente a los colapsos morales, eticos y gubernativos que les pasaron por el frente (Pedro Pierluisi y Wanda Vázquez); y una tragicomedia que engendró el parto del 'wandering' de Wanda Vázquez.
Aquella primera semana de agosto
Aquella primera semana de agosto pasado, trajo por fin la huída de Ricky Rosselló, y la plantada de Pierluisi a la Secretaria de Justicia Vázquez. Nunca sabremos si fue un ardid de la hoy gobernadora inelecta para entrampar a Pierluisi. No sabremos si fue un caso de crasa ineptitud o de cálculo deliberado para dejarlo que se manchase para siempre como el gobernador golpista. Pero de esos vientos le han parido dos precandidatos a la gobernación del PNP, cual de estos menos cualificado, y junto con ellos, una catarata de errores garrafales y marfiladas, de endosos a destiempo, formación de equipos en Fortaleza, fraccionamiento agudo, y un record de lluvias torrenciales de oportunismo, busconería y gansitud (se refiere a ser ganso).
Hoy el PNP tiene a un Pierluisi con el sello de golpista y candidato de la Junta de Supervisión Fiscal que va a ser retado por la gobernadora inelecta, de la pose y la parálisis, en una primaria en el partido raja'o. Pierluisi tiene el endoso prematuro de alcaldes PNP, legisladores, presidentes legislativos y hasta del Club Toyota de la Isla de Mona. Wanda Vázquez, no tiene ni el endoso de su Secretaria de la Gobernación, un caballito de Troya sembrado en Fortaleza por Pierluisi, que abandonó el Senado para ir a 'hacer patria' con Wanda Vázquez. Esta exsenadora, junto al Lcdo. Jose Sánchez Acosta son las primeras víctimas, la primera y segunda semana de diciembre del apetito de la inelecta gobernadora por los sequitos, las cámaras, y su nueva vocación advenediza por la política y la estadidad.
Cuatro meses más tarde de la renuncia de Rosselló, del golpe de Pierluisi a favor de la Junta y de su expulsión de Fortaleza por un supremo 9 a 0, ahora el PNP celebra ficticiamente la revancha primarista para dilucidar cuál de los dos --si no aparece alguien más-- será su candidato. La guerra civil que se profundiza en el PNP, durará nada más que hasta la primaria de principios de junio. Hay quien comenta que el maniobreo errático de la gobernadora Vázquez, responde a una programación precisa para adelantar otros intereses. Temprano es para saberlo. Pero cuidado con los disfraces.
Pudiera ser que de tanto disfrazarse sin pies, ni cabeza al PNP le suceda que se quede sin pies, ni cabeza y termine así deambulando por ahí sin pies, ni cabeza sin darse cuenta.
Un 'bonito' de Navidad
El anuncio de la eventual precandidatura de Vázquez le prolonga por el momento la presidencia del PNP al senador Thomas Rivera Schatz. Demora por casi seis meses la posible certificación de Pierluisi --y ahora de Vázquez--como presidente de ese partido. No hay forma de saber si la razón de esta candidatura en primera instancia tiene el propósito de cubrir ese flanco o de llenar esa base. Recordemos que hay apetitos voraces en el ambiente, necesidad urgente de supervivencia, moros en la costa federal, próximas vacantes al Supremo (son dos), nombramientos que repartir, y una curiosa vacante en la Secretaría de Estado que parece va para largo.
En estos días de sobresaltos en las precandidaturas es un peligro tener cubierta la vacante de quien puede ser el sustituto de la gobernadora en caso de que por la razón que fuese se precipite su vacante.
Distinto a como ella anticipa, la gobernadora inelecta Vázquez no tiene por que ser atacada, ella sola se basta y sobra para producir su lastre, que en este momento habla sobre todo de su falta de credibilidad. Esta es la misma persona que los otros días afirmaba que el status era divisivo y que no era para ella una prioridad; la misma persona que se daba contra el piso rehuyendo hablar de estadidad y la que se ufanaba de no ser política.
Veremos si ese lastre genera o no, las condiciones de su hundimiento. Por el momento saltando como los locos, el PNP casi acapara la atención, sin traer nada nuevo en la bola, solo tienen simples variaciones de sus desgastados e improductivos temas.
*El autor es doctor, abogado, profesor y estudioso de los procesos legislativos y reglamentarios. Fue asesor y luego portavoz del PIP en la Cámara durante 24 años.