Insisten en que la intervención respondió a un referido por violación de una orden del tribunal y aseguran que la madre fue orientada en todo momento.

El Departamento de la Familia (DF) desmintió hoy, jueves, las alegaciones de la joven empresaria cayeyana, Lisha A. Ramón, de que su hija fue removida por la agencia bajo engaño y también descartó que la intervención se debiera a que la mujer llevaba a su hija a su lugar de trabajo, un punto de ventas de jugos y frutas bajo un puente en su municipio.

Un vídeo de la joven madre se hizo viral en las redes sociales luego que alegara haber sido engañada por la agencia al quitarle a la niña, al tiempo que reclamaba ver la menor.

De igual modo, alegó que nunca fue informada de por qué le removían su hija y que todo se debía a una querella porque llevaba a la menor a su trabajo.

“Eso es totalmente falso. Queremos que el pueblo de Puerto Rico esté bien claro. El DF no discrimina por condición económica. Nosotros estamos bien firmes en proteger y garantizar el bienestar de los mejores. Este caso surge a raíz de una situación de violencia doméstica donde mamá amenaza a papá con un cuchillo”, destacó la secretaria interina del DF, Ciení Rodríguez, en conferencia de prensa.

Sostuvo que, a raíz de ese caso de violencia doméstica, fue un juez quien emitió una orden de protección en favor del padre, que está vigente hasta el 23 de enero de 2023, y también suspendió las relaciones materno filiales. Sin embargo, ambos padres violentaron esa orden del tribunal y por eso intervino el DF bajo la Ley 246 (Ley para la Seguridad, Bienestar y Protección de Menores).

“Es una menor de dos años, totalmente vulnerable, que no se puede cuidar por sí sola y depende 100% de dos adultos que son padre y madre que han demostrado que no tienen la capacidad para poder protegerla porque, aún sabiendo que un tribunal dictó una orden de que la madre no podía acercase a una menor por la situación que ocurrió de violencia doméstica, este padre la expuso. Así que el DF tiene que defender a esa menor”, apuntó, por su parte, la directora de la Administración de Familias y Niños (Adfan), Grenda Gerena.

Las funcionarias indicaron que sí hubo una querella previa contra la madre por supuesto maltrato, pero aseguraron que en ese momento se determinó que no había elementos suficientes para determinar que la menor estuviera en riesgo e insistieron en que su intervención de ayer surge a raíz de la violación de la orden de protección.

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Ramón Mejías alegó en su vídeo que la agencia le engañó al expresarle que llevarían a su hija a una revisión médica y nunca regresaron.

“En ningún momento le mentimos. Aquí está su firma del día de ayer donde ella está orientada de todos los procesos que el Departamento ha llevado y de lo que va a ocurrir una por una porque una de las cosas del procedimiento de intervención es explicarle lo que es la Ley 246, por qué estamos allí e interpretarle lo que el referido dice. Así que ella sabe… y ambos firmaron”, destacó Gerena.

De igual forma, rechazaron su reclamo de que no la han ayudado.

“Este es el tipo de cosas que debemos dejar bien, bien claro: Ella fue esta tarde al Departamento, nos ofrecimos a ayudarla y se fue… y no quiero que entremos a juzgar a mamá y a papá. Estamos en el proceso de investigar qué está pasando en ese hogar y qué cosas podemos hacer, no solo para ayudar a esa menor, sino también qué está pasando con mamá y papá que ha llevado a ese hogar a estar donde está”, subrayó Rodríguez.

La agencia confirmó que la menor está bajo la custodia del Departamento de la Familia y que tienen 72 horas para culminar su investigación. Luego, determinarán si acudirán al tribunal a solicitar la custodia permanente de la menor o identificar un familiar que se pueda hacer cargo de ella, aunque subrayaron que la prioridad de la agencia es identificar a una persona cercana de la niña que se pueda hacer cargo de ella.

Por el momento, Rodríguez dijo que mientras la investigación esté en curso, la madre no podrá ver a su hija, pero no descartó la posibilidad de que más adelante se pueda dar el encuentro.