Last Minute

Participaciones abiertas para el ‘Oscar’ de las organizaciones sin fines de

Tamaño

Guardar

Compartir

Durante veinte años, la Fundación Ángel Ramos ha premiado anualmente el esfuerzo, la eficiencia y la excelencia en la gestión que hace a diario el tercer sector a traves del Premio Tina Hills. Este año no será la excepción.

Los diversos rostros del tercer sector tendrán hasta el próximo lunes, 7 de noviembre, para someter en línea sus candidaturas. Las organizaciones elegibles al Premio deben rendir servicios directos a la comunidad en las áreas de arte y cultura, educación y servicios humanos.

La directora de la Fundación, Laura López Torres, explicó que existe una Junta Consultiva compuesta, por representantes de distintos sectores comunitarios que se dedican exclusivamente a evaluar las candidaturas al premio. Entre los criterios que se evalúan, aparecen la trayectoria de la organización, cómo con su aportación ayuda a mejorar la calidad de vida en Puerto Rico desde su flanco de batalla, ya sea el arte y la cultura, la educación o los servicios humanos. Además, agregó la directora, también se toman en cuenta factores de sostenibilidad yaspectos de liderato.

Es una especie de PremiosOscarpara el tercer sector en Puerto Rico, así lo han descrito. El galardón en metálico de $150,000 para la entidad ganadora, y $15,000 para las tres finalistas, está acompañado por el prestigio que acarrea el reconocimiento. En peticiones para fondos externos o en la promoción de los servicios, las organizaciones ganadoras han experimentado el posicionamiento que les ha brindado el TinaHills.

‘Para nuestra sorpresa de la Fundaciónel premio ha ido adquiriendo una cierta distinción y reputación. Nosotros no la estábamos buscando, no era el interés de la Fundación, pensamos que es un resultado del propio premio que quizás porque proviene de una fundación que cuenta con un respaldo, una trayectoria, y por lo consistente que ha sido en su compromiso con las instituciones’, opinó López Torres.

El director ejecutivo del Programa de Educación Comunal de Entrega y Servicio (P.E.C.E.S.), José Oquendo, recordó que cuando recibieron el galardón en el 2003, se encontraban inmersos en el desarrollo de su Centro de Desarrollo Integral, por lo que el premio fue ‘puntual y vital’ en esos planes de expandir su obra. La entidad radicada en Humacao, logró potenciar su modelo y atender toda la región este del país.

‘Para nosotros, que somos una entidad que nació en el este, muy pequeña en aquel momento, fue muy importante que la gente nos empezara a conocer. Te brinda un ‘standing’, un reconocimiento, no solo un valor monetario, sino de prestigio porque validan tu gestión. Es a lo que aspira cualquier organización que haya ese tipo de credibilidad, que haya confianza en la gestión, es el gran premio como le llamamos, a la obra social’, comentó.

En la mesa redonda ‘Premio Tina Hill y la importancia de la filantropía en tiempos de crisis económica’,la directora ejecutiva de Nuestra Escuela, AnaYrisGuzmán,elogió la labor de la Fundación recalcando que no solo se preocupan por el presente de las instituciones con laotorgaciónde fondos, sino por su futuro, con programas constantes de capacitación en pro de lasustentabilidad.

‘Nuestra Escuela ha sufrido recortes de un 35% en su presupuesto, lo que provocó el cierre de la escuela enVieques, un proceso sumamente doloroso porque conocemos la necesidad de servicios enVieques… Un ejemplo es que en estos momentos estamoscapacitándonosenemprendimientosocial para enfrentar la crisis, creando empresas que puedansubsidiarla operación’, contóGuzmán.

En efecto, la Fundación se ha encargado de llenar unas lagunas que a veces pueden obstaculizar la gestión de las organizaciones, en términos administrativos, fiscales y gerenciales. Es por ello que se creó la Iniciativa de DesarrolloOrganizacional, a través de la cual la Fundación ofrece herramientas, recursos y alternativas para lograr lasostenibilidaddel tercer sector y su pleno desarrollo.

‘Algunas empresas estánparticipando de un certificado de empresariado de laUniversidad del SagradoCorazóndonde están aprendiendo cómo sus organizacionespuedendesarrollarse como empresas sociales, lo que las puedeayudara liberarse de fondos privados que está mucho más contraída en término de donativos. Es abrir nuevas rutas en términos de lasostenibilidad, que este premio no tan solo reconozca y haga visible la labor apremiante de las sin fines sino que también lessirvade estímulo hacia lasostenibilidad’,exhortóLópez Torres.

El tercer sector y los servicios del Gobierno

Según la directora de la Fundación Ángel Ramos, ya múltiples estudios han probado la aportación del tercer sector en la Isla, el nivel y la calidad de su servicio, y cómo este representa un costo editado al Estado al ser una entidad sin fines de lucro. Por lo tanto, entiende que el Gobierno debería volver más la mirada a dichas organizaciones, en vez de duplicar esfuerzos o insistir en empresas privadas con ánimo de lucro.

‘Son servicios que el Estado no tiene por qué estarlos ofreciendo cuando cuenta con entidades que tienen la probada experiencia en la calidad del servicio por un costo mejor… que el Gobierno pueda ser más consistente y que reconozca sin mucha dificultad ni problema que efectivamente esto es un ‘asset’. En Puerto Rico,nos cuesta trabajo que sectores que toman decisiones en cuanto a política pública y presupuesto no lo tengan así de claro’, manifestó.

Oquendo fue quien trajo el tema en la mesa redonda, cuando condenó que a veces se mirara románticamentey se minimizara con paternalismo la gestión de estas empresas simplemente por carecer de ánimo de lucro.

‘La perspectiva que siempre hemos defendido es quecuando se mira las organizaciones, a lasinstitucionessin fines delucroles damos lo que sobra. No. Somos un sector importante que aporta más que a la economía, a un desarrollo social, a ayudar a personas en verdadero estado de vulnerabilidad social. Somos socios importantes,

‘Lo que proponemos es que las instituciones asuman su rol de exigirle y sentarse a la mesa de negociación con el ‘standing’ que le da la obra y que demuestre su resultado. Es una discusión que se tiene que dar porque tendemos a que se nos mire como hermanas de caridad… Tiene que haberuna mirada de profundo respeto y una rendición de cuentas’, agregó.

Para Oquendo, el Estado debe monitorear en su rol fiscalizador cuáles son los programas en toda la Isla que verdaderamente están siendo efectivos y están rindiendo una labor social de trascendencia.

‘Sabemos que en el país se hacen muchas distribuciones de dinero, pero debe haber mayor fiscalización en ese uso de recursos y verificar que haya una ganancia para el país. Proponemos que cualquier inversión debe estar sustentada en el buen uso y manejo de los recursos y los resultados que se han provisto y que ciertamente la inversión debe ir unida a que el Gobierno o la entidad que lo asigne sea un ente fiscalizador de esos buenos recursos’, explicó.

Sin embargo, dejó claro que tampoco el panorama debe transformarse para que las instituciones sin fines de lucro hagan el trabajo del Gobierno, sino que debe existir una ‘unidad holística’ para evitar la competencia desleal y la duplicidad de esfuerzos. Todos tienen que ser parte de una misma meta.

Las entidades ganadoras hasta el momento han sido:

SER de Puerto Rico (2016)

Nuestra Escuela (2015)

Boys <> & Girls Clubs de Puerto Rico (2014)

Asociación Pro Juventud y Comunidad Barrio Palmas (2013)

Jóvenes de Puerto Rico en Riesgo (2012)

Iniciativa Comunitaria (2011)

Politécnico Amigó (2010)

Colegio de Educación Especial y Rehabilitación Integral, CODERI (2009)

Hogares Teresa Toda (2008)

CREARTE (2007)

Fundación de Desarrollo Comunal, FUNDESCO (2006)