En el 2012 la Santa Sede bebió un promedio de 74 litros por habitante, es decir 98 botellas al año, según un estudio del Insitituto del Vino en California.

El Vaticano tiene el récord de consumo de vino per cápita del mundo. Además, según el estudio, su consumo de vino se incrementó en un 20% de 2011 a 2012. En 365 días pasó de 62 litros por cabeza a 74.

Pero no crea que hay un problema de alcoholismo en el pequeño país. Quizá su uso en las homilías aumenta el consumo. De hecho, algunos teorizan que el tamaño del país pudo haber alterado los resultados del estudio californiano. El Vaticano cuenta apenas con 800 habitantes por lo que las estadísticas pudieron afectarse.

No obstante, según el columnista del diario The Universe Catholic Weekly, Michael Winterbottom, la mayor tiempo no hay vino en la comunión.

Según reseñara la BBC, la prensa italiana se inclina a pensar que son los bajos precios del supermercado del Vaticano los que inflan de manera artificial su consumo de vino. En esta pequeña tienda, conocida como el "Spaccio dell'Annona" los impuestos son mucho menores que en Italia. Pero en esta tienda no puede comprar cualquiera, tan sólo los titulares de la tarjeta del Vaticano, que se concede a residentes y trabajadores de la Santa Sede.