Una baja en panel que atenderá querellas contra Presidente de la CEE
Se trata de la jueza Gina Méndez Miró, quien se inhibió "motu propio".
La jueza del Tribunal de Apelaciones Gina Méndez Miró se inhibió del proceso de evaluación de las seis querellas que pesan contra el presidente de la Comisión Estatal de Elecciones (CEE), Juan Dávila Rivera, que buscan su destitución del cargo.
Aunque Méndez Miró se inhibió por las partes involucradas en una de las querellas, adelantó que los cuatro señalamientos podrían consolidarse en uno solo, por tratarse de temas similares sobre una misma persona. Es por eso que sustentó su inhibición general en el caso de la querella de la aspirante a representante del Partido Popular Democrático (PPD), Yaramary Torres.
En una resolución con fecha de ayer, 26 de agosto, Méndez Miró citó que su inhibición "motu propio" se debía a que el representante legal de Torres es el abogado José Aníbal Herrero Acevedo.
La jueza se basó en los Cánones de Ética Judicial, el Reglamento del Tribunal de Apelaciones y las Reglas de Procedimiento Civil, que desglosan las instancias en que un juez o una jueza podría inhibirse de atender casos particulares.
Entre las justificaciones descritas en esos documentos se encuentran la existencia de amistad entre las partes, interés económico en el caso, tener prejuicio o parcialidad hacia una de las partes o "por cualquier otra causa que pueda razonablemente arrojar dudas sobre su imparcialidad para adjudicar o que tienda a minar la confianza pública en el sistema de justicia".
Conforme al Código Electoral vigente, Méndez Miró fue seleccionada de forma aleatoria junto a otros dos jueces del Tribunal de Apelaciones para conformar el panel que determinaría si Dávila Rivera fue negligente en el manejo de las primarias el pasado 9 de agosto.
Una de las querellas contra Dávila Rivera también aborda violaciones a la Ley de Ética Gubernamental y al Código Electoral por el mal uso de su perfil de Twitter.
Con la decisión, el panel ahora queda compuesto por: Juan Hernández Sánchez, quien fungirá como presidente, Felipe Rivera Colón y Misael Ramos Torres.
En caso de surgir otra vacante, los jueces Fernando Bonilla Ortiz y Félix Figueroa Cabán están en lista para reemplazarlos.
Méndez Miró está casada con la jueza presidenta del Tribunal Supremo, Maite Oronoz Rodríguez, quien firmó la resolución de selección de jueces para este panel, aunque la elección fue aleatoria.
El pasado 9 de agosto, el proceso primarista fue detenido porque los precintos no contaban con papeletas y materiales necesarios para garantizar la votación. Luego, el Tribunal Supremo determinó que el evento electoral continuaría el 16 de agosto y, en su opinión como parte de la mayoría, Oronoz Rodríguez atribuyó graves fallas a Dávila Rivera.