Carlos Delgado promete una transformación “radical, dramática y completa”
La plataforma de gobierno del PPD propone un ELA fuera de la cláusula territorial, descentralizar el gobierno y agilizar la negociación con los acreedores de la deuda.
Al pedirle un voto de confianza al pueblo en las próximas elecciones, el candidato a la gobernación por el Partido Popular Democrático (PPD), Carlos Delgado Altieri, presentó un mapa de ruta para el país, que ofrece un "gobierno transformador", descentralizado, dotado de tecnología e intolerante al fraude y la corrupción.
A través de las 350 páginas de la plataforma de la Pava, el alcalde de Isabela detalló los 16 pilares que darán paso a la llamada “segunda transformación”, una frase que ha promovido como estribillo de campaña, y con la cual pretende retomar la energía de los cambios impulsados por el fundador de la colectividad, Luis Muñoz Marín. Algunos críticos, sin embargo, han postulado que esa frase parece inspirada en una estrategia de desarrollo económico del fenecido exgobernador, Rafael Hernández Colón
En la plataforma de gobierno aprobada la semana pasada, Delgado Altieri se presentó a los electores y electoras como el “portador de un proyecto serio, novedoso, integral e inclusivo” que transformará a Puerto Rico para sacarlo de la debacle económica y cambiará su rumbo hacia un derrotero de progreso. También propuso la renovación del PPD y la evolución del Estado Libre Asociado (ELA) fuera de la cláusula territorial.
Pero mientras el programa de gobierno evadió el término ELA Soberano y colocó el estatus como el último punto de la agenda de trabajo, la portada del “Proyecto de País para la Segunda Transformación de Puerto Rico” desplegó una bandera de Puerto Rico con el triángulo azul celeste similar al color de la bandera de Lares y distinto al azul marino que prefieren los estadistas y que se asemeja al añil de la bandera de Estados Unidos. Abonó a ese aire soberanista que la portada del documento exhibiera una versión diminuta de la insignia de la Pava y la notable ausencia de la bandera estadounidense, pese a que la plataforma reiteró “la bilateralidad del pacto entre Puerto Rico y Estados Unidos”.
Contrario a la plataforma del candidato a la gobernación por el Partido Nuevo Progresista y su rival político, Pedro Pierluisi Urrutia, que incorporó un capítulo sobre la agenda de trabajo de la comisionada residente Jenniffer González Colón para presentar un frente unido, la propuesta de Delgado Altieri no mencionó a su compañero de papeleta, el exgobernador y ex comisionado residente, Aníbal Acevedo Vilá. Por el contrario, en el documento predominaron las referencias y exhortaciones en singular como “mi compromiso” o “mi palabra empeñada”.
El documento tampoco incluyó el nombre de las personas que colaboran en su redacción contrario al uso y costumbre y las políticas de transparencia. El plan del penepé “Puerto Rico Promete” enumeró a los colaboradores.
Como cierre de su mensaje y en un intento de apelar al sentimiento patrio, Delgado Altieri también se dirigió a los votantes como “compratiota” y advirtió que un voto por los otros partidos o movimientos políticos “es votar PNP”. Luego pidió un voto para lograr la “segunda transformación”.
La segunda transformación económica y social
Con el imaginario de Muñoz Marín como telón de fondo, Delgado Altieri elaboró un programa de gobierno que compiló comentarios y preocupaciones de la ciudadanía e incorporó los principios de desarrollo sostenible de la Organización de las Naciones Unidas.
“Vengo a transformar a Puerto Rico. Vengo a darle vuelo a la esperanza”, aseguró Delgado Altieri en su mensaje.
“Esa transformación tiene que ser radical, dramática y completa”, agregó.
Esa transformación se guiará por lineamientos de desarrollo económico, educación, seguridad, salud, agricultura y seguridad alimentaria, transformación social, infraestructura, ambiente y crisis climática, Covid-19, fondos federales, arte y cultura, recreación y deportes, retiro, deuda, Junta de Supervisión Fiscal y estatus.
Todos estos elemento se suman para convertirse en el llamado "Plan de Desarrollo Económico y Social de Puerto Rico 2021-2030". Dicho plan tiene como objetivo alcanzar un crecimiento económico sostenido del 3%, crear 300,000 nuevos empleos en el sector privado, aumentar la tasa de participación laboral al 55% y elevar el ingreso mediano per cápita en 30% o de $20,873 a $27,134 en un plazo de 10 años.
Para alcanzar estas metas, Delgado Altieri indicó que usará de manera eficiente la millonaria partida de fondos federales asignados a la isla tras el paso del huracán María y como resultado de la crisis salud pública creada por el Covid-19. Además procurará un incentivo federal para atraer nuevas empresas farmacéuticas y de manufactura. Esa propuesta ocurre en momentos en que la administración del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha mencionado que la producción de medicamentos y artículos médicos debe regresar a Estados Unidos y Puerto Rico como cuestión de seguridad nacional a raíz de la pandemia.
Apostará también a las cooperativas. El alcalde de Isabela propuso recapitalizar el sistema financiero cooperativo y rectificar los efectos de las Inversiones Especiales a nivel de las cooperativas de base por cambios debido al impago de la deuda pública. Esto requerirá que el Departamento de Hacienda transfiera $600 millones a la Corporación Pública para Supervisión y Seguro de Cooperativas (Cossec) durante el año fiscal 2020-2021.
En el caso específico del impuesto a las empresas foráneas, que representa cerca del 33% de los ingresos del fondo general o $2,000 millones anuales, apuntó que trabajará con estas multinacionales para identificar “medidas impositivas alternas” que sustituyan los ingresos generados por la Ley 154, una estrategia similar a la encaminada por el gobierno de turno.
Señaló que aprobará legislación que elimine progresivamente el arbitrio, que expira el año entrante, y que permita que el pago de dicha contribución a Puerto Rico pueda reclamarse como un crédito en los Estados Unidos. Esta alternativa no es nueva. Algunos economistas la han discutido luego de que el presidente Trump aprobó una reforma tributaria que va a contracorriente con el arbitrio a las foráneas y que solo permitiría a estas empresas reclamar como crédito parte del impuesto pagado en la isla.
Como parte de sus estrategias para mejorar el clima de negocios, también recomendó medidas para simplificar los trámites tributarios, eliminar la burocracia, adoptar medidas de transparencia y restituir el principio de mérito en la Rama Ejecutiva.
La educación y la UPR
Habló del cambio climáticio y la educación, pero contrario a otros candidatos no dedicó un capítulo específico a las mujeres.
“La educación es una inversión de valor incalculable”, dijo.
A tono con esta visión, prometió expandir el modelo Montessori a más escuelas a través del sistema de educación pública, impulsar un programa que llamó CASA para atender el problema de deserción escolar, ofrecer servicios educativos a adultos y regresar a los horarios de clase extendidos.
Aunque no se comprometió a adoptar la carta circular de perspectiva de género, que eliminó la exsecretaria de educación y acusada federal, Julia Keleher, Delgado Altieri aseguró que en las escuelas del país se enseñará una educación con perspectiva de género que “garantizará una enseñanza libre de discrímenes”. Para cumplir con esta meta, “formaremos a estudiantes con entendimiento claro de la equidad, del derecho a la justicia, a la libertad y a la vida que tenemos todos y todas por el hecho de ser seres humanos”.
En el caso del retorno a los planteles escolares en tiempos del coronavirus, recalcó que los estudiantes regresarán a las aulas “una vez la curva de contagio esté debidamente controlada” y se adopten las medidas necesarias para garantizar la salud y seguridad de todos los miembros de la comunidad escolar.
Según el plan, el regreso se hará de manera escalonada y mediante un sistema de enseñanza híbrido que alternará clases presenciales y clases a distancia en intervalos de una a dos semanas. Los niños y niñas de escuela elemental retornarán a las aulas primero, seguido por alumnos de secundaria y los estudiantes de escuela superior al final.
A nivel de una estrategia nacional para atender la pandemia, Delgado Altieri rescatará la figura del epidemiólogo del Estado, una posición que eliminó el actual secretario de Salud, Lorenzo González Feliciano, y establecerá un centro de mando único que coordine la respuesta gubernamental ante el Covid-19, entre otras medidas. En términos de salud, se comprometió a detener el espiral de alzas de los medicamentos y procurar una alternativa que permita extender la cubierta médica gubernamental a más personas.
La Universidad de Puerto Rico también jugará un papel importante en ese proyecto de país que Delgado Altieri busca que los electores y electoras refrenden con su voto el próximo 3 de noviembre. Apuntó que promoverá una política pública de descentralización de la administración central hacia los tres recintos principales (Río Piedras, Mayagüez y Ciencias Médicas) y hacia los ocho recintos más pequeños para fortalecer “sus autonomías fiscales y particularidades académicas”.
“Legislaremos una nueva fórmula de aportación presupuestaria responsable y vinculada a la productividad del país, acompañada de una garantía de no reducción de los fondos asignados previamente. La legislación incluirá además la nueva fórmula presupuestaria que iniciará con una asignación de 1.05% del Producto Nacional Bruto (PNB) del 2020 y continuará incrementando en la medida en que el PNB aumente, hasta alcanzar el 1.38% de éste”, consignó el programa de gobierno.
Pero esa independencia fiscal viene con una mayor rendición de cuentas y cumplimiento estricto del principio de mérito en todos los puestos del primer centro docente del país. Además, el alcalde de Isabela volverá a cambiar la composición de la actual Junta de Gobierno, que en esta reencarnación se llamará Junta Directiva. Ese nuevo cuerpo rector contará con mayor representación de los diversos sectores universitarios y no tendrá "ataduras político-partidistas”.
En el renglón de seguridad, mencionó que aumentará los niveles de esclarecimiento de los delitos, promoverá la policía comunitaria y dará una “lucha inteligente” contra el narcotráfico y las armas ilegales. No acaba ahí. Adoptará una mirada salubrista para atender a las personas drogodependientes y creará un grupo de análisis de la Ley de Drogas para que evalúe la adaptación del Plan de Portugal en Puerto Rico. En el 2001, Portugal despenalizó la posesión para uso personal de todas las drogas.
La deuda y la JCF
La plataforma no menciona auditar la deuda pública. Ofreció, en cambio, agilizar el proceso para concluir negociaciones con los acreedores.
“Una de las prioridades de mi gobierno será cumplir con los requisitos para salir de la quiebra, cumplir con el pago de la deuda y lograr que la Junta de Control Fiscal finalice su función en Puerto Rico”, señaló.
“Revisaremos detalladamente la razonabilidad de las propuestas de reestructuración que aún están en proceso, incluyendo la de la Autoridad de Energía Eléctrica y la de las Obligaciones Generales del ELA, incluyendo la deuda de la Autoridad de Edificios Públicos, entre otras”, agregó en otra parte.
Inconforme con la falta de poderes del gobierno ante la Junta de Control Fiscal, la plataforma de gobierno de Delgado Altieri discutirá con miembros del Congreso de Estados Unidos y del Departamento del Tesoro federal enmiendas a la Ley federal Promesa para “asegurarnos de que se le devuelvan poderes al pueblo de Puerto Rico”.
“El Presidente del PPD y Gobernador nombrará un comité permanente para que escuche el sentir de los afiliados del PPD y desarrollen una propuesta de transformación del Estado Libre Asociado no colonial y no territorial con presencia internacional, que sea consistente con nuestra relación permanente con los Estados Unidos incluyendo la ciudadanía americana por nacimiento. La misma se le presentará al Pueblo de Puerto Rico y al Gobierno de los Estados Unidos”, consignó la plataforma de gobierno.
“Aunque favorecemos el proceso de una asamblea de estatus y ése será el proceso que promoveremos, reconocemos que ningún proceso que no sea producto de un diálogo entre todas las partes, incluyendo a los Estados Unidos, puede producir resultados que sean generalmente aceptados”, abundó.
Mira el programa de gobierno aquí.