Nuevo Presidente de la CEE reconoce que no hubo proceso de transición con su predecesor
Pese a los escollos, confía en que las elecciones se celebrarán el 3 de noviembre.
A escasas 24 horas de su designación, el nuevo presidente de la Comisión Estatal de Elecciones (CEE), Francisco Rosado Colomer y la presidenta alterna Jessika Padilla Rivera realizaban un mapa de composición de escena del proceso electoral del país a escasos 55 días de las elecciones generales.
En la mañana, la jueza presidenta del Tribunal Supremo, Maite Oronoz Rodríguez, tomó juramento al dúo, que pasó horas en reuniones de presentación y escuchando los planteamientos de los comisionados electorales, que ayer escogieron a ambos jueces -por unanimidad- para regentar los destinos del ente electoral luego de la abrupta salida del expresidente Juan Ernesto Dávila Rivera.
Seis horas luego de asumir el cargo, Rosado Colomer reconoció que no existió un proceso de transición con su predecesor y que no ha evaluado con detenimiento el nuevo Código Electoral.
“La contestación es no. No hemos tenido un proceso de transición. No he tenido comunicación con el ahora juez Dávila. No es que no esté en agenda, es que volvemos, empezamos hoy y no hay un calendario de actividades. Lo estamos creando en la marcha a base de lo que es nuestra experiencia”, apuntó Rosado Colomer a preguntas de NotiCel.
Señaló que un funcionario de la CEE le presentó el calendario con poca información y con fechas de algunos “eventos generales”.
Pese a la complejidad de la encomienda, Rosado Colomer y Padilla Rivera se mostraron confiados en que podrán cumplir con los trámites internos necesarios para que las elecciones generales puedan realizarse el próximo 3 de noviembre.
“No hay garantía, pero no vemos nada que nos impida hacerlo”, respondió Padilla Rivera sobre el compromiso con mantener la fecha de las elecciones generales.
Con esta fecha como eje de su agenda de trabajo, el dúo trabajará a todo vapor para firmar los reglamentos de voto adelanto, voto ausente y escrutinio, entre otros, que Dávila Rivera dejó pendientes al renunciar súbitamente el jueves pasado para regresar a su puesto en Rama Judicial.
También identifican pagos que deben realizarse de forma expedita e evalúan los recursos que necesita la CEE para que las elecciones transcurran sin escollos y evitar el fiasco de las primarias del Partido Nuevo Progresista y el Partido Popular Democrático y que desembocó en la dimisión de Dávila Rivera en medio de un proceso administrativo que buscaba destituirlo.